Una tarde de diciembre, a la luz cambiante del ocaso, un escritor, sentado a su mesa de trabajo, decide dar un paseo por el mundo, deambular por patios, plazas y callejuelas, perderse por arrabales y volver a su casa amparado ya en la oscuridad.
En el camino quedará una doble huella: la de la mirada hacia lo exterior y la de la duda que contempla lo que está dentro de sí. Pero todo será visto como si fuera la primera vez, como si al cerrar los ojos la realidad apareciera en su verdad más pura.
Con La tarde de un escritor, Peter Handke, uno de los más grandes creadores en lengua alemana, prosigue su personal indagación en las relaciones del hombre consigo mismo y con lo que está a su alrededor.
Cuando Maeve desaparece sin dejar rastro, su hija Sloane no se sorprende: si su madre tenía que desaparecer, solo podía ser en extrañas circunstancias . Sin embargo, esta vez es distinto: al cabo de unos días de la desaparición de su progenitora, Sloane recibe un paquete que esta misma le ha mandado, con varios miles de dólares, la escritura de su casa y un arma. También hay una nota con las siguientes palabras: Vén delo todo. Quédate la pistola. Practica. Huye. Ahora. A solo dos semanas de graduarse como arquitecta y en medio de esta encrucijada personal, Sloane recibe la oferta de trabajo de un misterioso millonario que quiere construir seis memoriales para seis personas que murieron, de nuevo, en extrañas circunstancias. A medida que Sloane investiga esas muertes, el consejo de su madre se hace cada vez más presente. ¿En quién puede confiar ahora Sloane? ¿Tendrá tiempo de seguir las indicaciones de su madre cuando llegue al final del laberinto que ha ido creando su siniestro empleador?
Golan Trevize, exconsejero de la Primera Fundación, debe determinar el futuro del desarrollo galáctico. Junto al profesor Janov Pelorat, cruzará la galaxia en busca del planeta ancestral de la humanidad. Sin embargo, en los mundos situados más allá
de la influencia de la Fundación, donde pronunciar la palabra «Tierra» es tabú, la superstición dificulta su búsqueda. Así pues, completará una odisea llena de peligros, de la que dependerá el destino del Imperio y de la propia civilización.