El nombre del viento (Crónica del asesino de reyes 1)
En una posada en tierra de nadie, un hombre se dispone a relatar, por primera vez, la auténtica historia de su vida. Una historia que únicamente él conoce y que ha quedado diluida tras los rumores, las conjeturas y los cuentos de taberna que le han convertido en un personaje legendario a quien todos daban ya por muerto: Kvothe... músico, mendigo, ladrón, estudiante, mago, héroe y asesino.
Ahora va a revelar la verdad sobre sí mismo. Y para ello debe empezar por el principio: su infancia en una troupe de artistas itinerantes, los años malviviendo como un ladronzuelo en las calles de una gran ciudad y su llegada a una universidad donde esperaba encontrar todas las respuestas que había estado buscando.
El temor de un hombre sabio (Crónica del asesino de reyes 2)
El hombre había desaparecido. El mito no. Músico, mendigo, ladrón, estudiante, mago, trotamundos, héroe y asesino, Kvothe había borrado su rastro. Y ni siquiera ahora que le han encontrado, ni siquiera ahora que las tinieblas invaden los rincones del mundo, está dispuesto a regresar. Pero su historia prosigue, la aventura continúa, y Kvothe seguirá contándola para revelar la verdad tras la leyenda.
Cuando el joven y talentoso caballero Collum llega a Camelot para competir por un lugar en la Mesa Redonda, descubre enseguida que ha llegado demasiado tarde: el rey Arturo murió hace dos semanas en la Batalla de Camlann, y solo queda un puñado de caballeros de la Mesa Redonda.
Y los supervivientes no son los héroes de la leyenda, como Lancelot o Gawain. Son los caballeros más excéntricos de la Mesa Redonda, como Sir Palomides, el Caballero sarraceno, y Sir Dagonet, el bufón de Arturo, quien fue nombrado caballero como una broma. A ellos se une Nimue, que fue la aprendiz de Merlín hasta que se volvió contra él y lo enterró bajo una colina.
Pero de ellos depende reconstruir Camelot en un mundo que ha perdido su armonía, una Britania abandonada por Dios a la que las hadas y los antiguos dioses están regresando, liderados por Morgana. Deberán reclamar Excalibur y hacer que este mundo en ruinas florezca de nuevo. Pero antes deberán resolver el misterio de por qué cayó el noble y valeroso Rey Arturo.
En El tablero de la reina, Zueco te sumerge en el final del reinado de Isabel la Católica, una época de conquistas y grandes decisiones que marcaron el futuro del mundo.
El mapa de un mundo nuevo te lleva a los orígenes del ajedrez moderno, mientras exploras las intrigas de la Corte de Isabel y los oscuros misterios que envuelven la muerte de un noble.
En la ciudad industrial de Coketown el señor Gradgrind dirige una escuela donde se enseña que la vida es «una pura cuestión de números» basada en «hechos» e inculca los mismos principios a sus hijos. Cuando un día sorprende a dos de ellos, Tom y Louisa, espiando entre las barracas de un circo, se enoja sobremanera y les recuerda que la imaginación y el sentimiento son «tonterías destructivas». El fabuloso mundo del circo sirve de contrapartida al sistema despótico y estrictamente regulado de la ideología utilitarista, personificada especialmente en la figura del siniestro banquero Bounderby, y que a lo largo de la trama lo único que prácticamente hace es engendrar canallas y víctimas.
1912 es el año correspondiente a este séptimo volumen de los artículos de G.K. Chesterton. Año del hundimiento del Titanic; del setenta aniversario del semanario londinense The Illustrated London News para el que escribió entre 1905 y 1936; año del escándalo Marconi, que puso en jaque a David Lloyd George, Chancellor of the Exchequer (equivalente al ministro de Hacienda, en Inglaterra); año de la publicación de su revitalizadora novela Manalive, así como de la publicación del conjunto de ensayos The Great State de H. G. Wells, con quien continuará sus divertidas, inteligentes y lúcidas discusiones... sin olvidar a un contrincante habitual: el dramaturgo George Bernard Shaw. 1912, el año en que Chesterton funda The Players' Club, una compañía teatral, y cuando comienza a construir su estudio en Beaconsfield.
LA ECONOMÍA DE ESTADOS UNIDOS SE ENCUENTRA EN ruinas. Las empresas cierran, en las tiendas es imposible encontrar los productos básicos y la población empieza a perder la esperanza en recuperar la prosperidad y la autonomía. La respuesta del gobierno es aumentar cada vez más las regulaciones, el control de cualquier actividad y el colectivismo. La rebelión de Atlas es una novela de misterio, pero, como dijo Ayn Rand, «no sobre el asesinato del cuerpo de un hombre, sino sobre el asesinato ?y el renacimiento? del espíritu humano». Es la historia de un hombre que dice que parará el motor del mundo, y lo hace. ¿Es ese hombre un des-tructor malévolo o el mayor de los libertadores? ¿Por qué tiene que luchar, no contra sus enemigos, sino contra aquellos que más le necesitan, incluso contra la heroína a quien ama? Obra cumbre de la gran defensora de la razón y de la libertad individual frente a los excesos del Estado y su mentalidad autoritaria, en ella, Rand expone cómo el declive de la competencia entre las grandes empresas, la desmoralización entre quienes deberían liderar la actividad económica y creativa y la inercia del ciudadano común conducen a la pobreza moral y material. Mezcla de thriller de acción en las altas esferas y de reflexión filosófica sobre el Estado y el individuo, La rebelión de Atlas resume la filosofía de Ayn Rand en una historia que integra de forma magistral cuestiones relacionadas con la ética, la metafísica, la epistemología, la política, la economía y el sexo. Si quieres leer un único libro y entender la visión del mundo de Rand, éste es el libro.
Un hecho imposible deja perplejo al cuerpo de exploración El cuerpo de exploración está perplejo: tras la aparición de titanes dentro del muro, son incapaces de encontrar la brecha que, por lógica, han tenido que usar para acceder a las zonas protegidas por los humanos. Pero ¿y si están todos equivocados? ¿Y si en vez de centrar sus esfuerzos en encontrar esa hipotética brecha el problema es que hay traidores en su seno?
—¿Qué crees que está protegiendo ese cerebro que tienes? La guerra ha acabado. Holdfast está muerto. La Llama Eterna se ha acabado. No queda nadie a quien salvar.
Aunque en el pasado era una alquimista con futuro, Helena Marino es ahora una prisionera, de guerra y de su propia mente. Sus amigos y aliados de la Resistencia han sido brutalmente asesinados, sus habilidades, reprimidas, y el mundo que conocía, destrozado.
Tras una larga guerra, la nueva clase dirigente de Paladia, familias corruptas del gremio y nigromantes depravados, cuyos infames no muertos fueron clave para otorgarles la victoria, mantienen cautiva a Helena.
Según los registros de la Resistencia, era una sanadora insignificante de sus filas. Pero Helena sufre de una inexplicable pérdida de memoria que le ha hecho olvidar los meses previos a su cautiverio y que hace preguntarse a sus enemigos: ¿de verdad es tan insignificante como parece o su pérdida de memoria esconde alguna pieza clave sobre la última táctica de la Resistencia?
Para descubrir los recuerdos enterrados en el fondo de su mente, envían a Helena al Sumo Inquisidor, uno de los nigromantes más poderosos y despiadados de este nuevo mundo. Atrapada en su mansión derruida, la lucha de Helena (la de proteger su historia perdida y la de preservar los últimos jirones de su persona) apenas ha comenzado, pues su cárcel y carcelero esconden sus propios secretos… Secretos que Helena debe desvelar, cueste lo que cueste.
Los cuentos de Ernest Hemingway son no solo lo mejor de su obra, según suele admitir la crítica, sino también fundamentales para entender el siglo. En esta edición recuperamos, con nueva traducción de Damián Alou, la recopilación que el propio Hemingway hiciera de todos sus cuentos en 1938, conocida como Los cuarenta y nueve primeros cuentos, y que incluye relatos tan magistrales como «Los asesinos», «Las nieves del Kilimanjaro» o «Padres e hijos». Su mundo estético y moral —ese espacio traspasado por la soledad, la inpidualidad y la brutalidad— se encuentra aquí destilado, despojado de todo ornamento, encerrado en el sustantivo y el adjetivo precisos, seco, sobrio, cegador, latente. La caza, la pesca, el boxeo, la guerra, el alcohol, el deseo y la derrota son algunos de los materiales con que se construye esta obra, cuyo aliento perdura con un vigor insospechado.