Cuando Eufrasia Vela empieza a trabajar como cuidadora de ancianos, no sospecha que su oficio la llevará a una encrucijada existencial. La íntima relación que mantiene con doña Carmen, el doctor Harrison y Los Siete Magníficos —entrañables personajes que se apoderan de su pensamiento y su cariño— la obliga a replantearse su papel de madre y hermana, las vicisitudes de la longevidad, las formas de la compasión y el sorpresivo valor que los cuyes, esos conejillos de Indias tan peculiares, adquieren en su presupuesto moral. Acompañada de una banda sonora donde resuenan el huayno, el jazz, la balada y el pop, la historia de Cien cuyes rescata a la vez la impronta del cine como un contrapunto de la existencia de sus personajes y una fuente de revelaciones sobre el sentido de la vida y de la muerte cuando esta se aproxima.
«Cien cuyes es una novela tragicómica, situada en la Lima de hoy, que refleja uno de los grandes conflictos de nuestro tiempo: somos sociedades cada vez más longevas y cada vez más hostiles con la gente mayor. Paradoja que Gustavo Rodríguez aborda con destreza y humor. Un libro conmovedor cuyos protagonistas cuidan, son cuidados y defienden la dignidad hasta sus últimas consecuencias».
Publicado inicialmente en 1933 y ampliado en 1935, Residencia en la tierra es el gran clásico del «más grande poeta del siglo XX en todos los idiomas», en palabras de Gabriel García Márquez. Después de escribir Crepusculario y Veinte poemas de amor y una canción desesperada, y a raíz de una aguda crisis vital sufrida durante su estancia consular en oriente, Neruda se embarcó en la composición de este libro monumental que supuso una ruptura decisiva respecto a su obra anterior y la poesía en español.
Residencia en la tierra es uno de los poemarios más originales y emocionantes de Neruda y también uno de los más arriesgados por su vanguardismo, vinculado indirectamente con la corriente surrealista. Una honda reflexión sobre la vida, sobre la relación entre la naturaleza y los seres humanos, sobre la pérdida y sobre nuestro papel en el universo.
Otro tipo de música evoca la vida familiar —mediante la añoranza, la rabia y la felicidad— e íntima de la autora, parte de esta valiosa constelación artística conocida como «Familia Parra», y ofrece, mediante breves historias y aforismos, una introducción divertida y original a la contemplación de lo que nos ocurre cada día.
«Tengo mis dudas sobre lo que escribo, sobre el real interés en lo que busco. Antes quise que mis canciones no las escuchara nadie. Algo de voyerismo tiene todo esto. Tú mismo ahora estás mirando por un agujero cómo me desnudo. Crees que lo voy a hacer por completo. En verdad lo estoy haciendo».
De la fórmula «poema épico-cómico en prosa» que Fielding eligió para encuadrar Joseph Andrews dentro de la tradición clásica, el elemento más significativo es, sin duda, el adjetivo «cómico». Inspirándose en don Quijote el autor crea un personaje, el vicario Adams, que ha conseguido, gracias a las virtudes que lo adornan, ganarse el afecto de los lectores de todos los tiempos pese a sus excentricidades y a su absurdo comportamiento.
Aunque La historia de las aventuras de Joseph Andrews es una de las mejores introducciones a la Inglaterra del siglo XVIII, su interés no es exclusivamente histórico, pues con el paso del tiempo sigue demostrando cómo Fielding creó en esta novela, iluminándola con su espíritu, un mundo propio que sigue hoy tan vivo como hace más de dos siglos.
LA PARTIDA LLEGA A SU FIN.
Sinaí Ferreira haría cualquier cosa para conseguir a Axer Frey, pero haría muchas más por ganarle y si eso significa poner en marcha la partida más importante de su vida que así sea.
La relación con los Frey se intensifica cada vez más y termina por atrapar a Sinaí en medio de las disputas y rencillas familiares, pero en vez de temerlos, los reconoce como rivales dignos de su intelecto.
Así que llega el momento: las piezas están colocadas en el tablero y ya es hora de que alguno dé jaque mate a esta tensa persecución que comenzó con una simple partida de ajedrez.
En 1923 vieron la luz las Elegías de Duino, uno de los ciclos poéticos más influyentes del siglo XX. Rainer Maria Rilke había empezado a escribirlo diez años antes, una década en la que el mundo cambió de forma vertiginosa. Las elegías dan vueltas a todo lo que estaba desapareciendo en un entorno cada vez más tecnificado: el sentido de la trascendencia, el amor más profundo y radical, la condición efímera del ser humano. Este volumen incluye, además de una nueva traducción a cargo de Adan Kovacsics y Andreu Jaume, los poemas que Rilke escribió en aquella época sobre la misma temática y una selección de cartas sobre la gestación de la obra. Todo esto la convierte en la edición más completa, ambiciosa y rigurosa que se ha hecho en castellano de este clásico de las letras europeas.