Pirineos, años cuarenta. Sol Mentruit debe huir de su pueblo y refugiarse entre un grupo de contrabandistas en Andorra por haber presenciado un asesinato. Una vez allí, entra en una red de evasión en la que empieza a llevar documentación sensible al consulado británico de Barcelona. En medio de sus viajes se enamora de Max Schell, un francés estrafalario e intelectual del que descubrirá que es un oficial alemán. Cuando el líder de la red, Quim Baldrich, se entera de la relación entre Sol y Max, la expulsa, pero ella decide realizar un último acto para demostrar su lealtad y llevar a un grupo de refugiados a cruzar los Pirineos de Toulouse a Barcelona para salvarlos. Diferentes historias se irán entrecruzando hasta confluir en ese momento que resultará definitivo para todos.
¿Cómo alguien con tan mala suerte en sus relaciones puede ser la reencarnación de la diosa del amor, la sensualidad y la belleza?
Tras pillar a su novio poniéndole los cuernos, Paula se va de crucero con su amiga Mónica por las Islas Griegas. En el templo de Apolo en Delfos, un hippy que lleva un cuervo en el hombro, fuma mucha marihuana para dispersar las visiones y asegura ser el oráculo le revela que ella es la reencarnación de Afrodita, la diosa del amor.
En ese momento, Paula iniciará una alocada aventura en la que se cruzará con otros dioses griegos reencarnados como Ares, Hermes o Zeus, además de luchar contra los malvados Hefesto y Eris. Paula deberá encontrar la forma de ser amada genuinamente sin usar sus poderes… ¿Lo logrará?
Soy Afrodita es una novela disparatada y divertida que se sirve de la fantasía para hablar de temas reales y de actualidad: desde la falta de autoestima a la soledad, pasando por las relaciones tóxicas; todo ello aderezado con grandes dosis de salseo, tanto actual como mitológico.
¿Te atreves a descubrir a tu diosa interior?
La infancia en una ciudad de las afueras de Barcelona, la madurez en una ciudad alemana: un emocionante e irónico relato de iniciación en forma de memorias literarias.
¿Cómo contar los momentos que iluminaron nuestra infancia, o los que nos acomplejaron en nuestra adolescencia? ¿Cómo dar cuenta de algunos pequeños descubrimientos que luego fueron importantes? ¿O de las historias de terror que sirvieron de rito de paso? ¿Cómo transmitir la convivencia con cuatro generaciones de una misma familia? ¿Cómo explicar nuestra mirada y experiencia cuando hemos pasado la mitad de la vida en otro país y en otra lengua? Este emocionante libro de Rosa Ribas nos descubre que todo ello, y mucho más, puede contarse, y hallar sentido, cuando descubrimos la panoplia de recursos, géneros y precedentes que la tradición narrativa pone a nuestra disposición. Descubrimos así cómo contar solo con sutiles detalles las experiencias de una niña zurda, compadecer con risas las vivencias de una adolescente miope, o entender, con algunos equívocos lingüísticos, lo que significa para una adulta residir en otra cultura. A la vez que recorremos enseñanzas literarias adquiridas a lo largo de la vida, pero en realidad asistimos a un emocionante, irónico y doloroso relato de iniciación en forma de memorias.
Noviembre de 2008: Barack Obama gana las elecciones. Entre los republicanos cunde el desánimo e incluso la inquietud ante la deriva que puede tomar el país. Algunos de los millonarios donantes del partido están tan alarmados que deciden tomar cartas en el asunto y actuar.
Uno de ellos, el Pez Gordo, con residencia en Palm Springs, se pone al frente de una potencial conspiración, para lo cual convoca a varios colegas con grandes fortunas y a algún viejo amigo con contactos de muy alto nivel en Washington. A las reuniones se incorporan también un juez y hasta un general de pasado y presente algo difuso.
Y mientras estos patriotas preocupadísimos por su país (y también por sus bolsillos) urden maquinaciones para manipular a la opinión pública y, llegado el momento, actuar contra el gobierno salido de las urnas, en el frente familiar al Pez Gordo todo se le desmorona. Su mujer Charlotte tiene un serio problema de alcoholismo y soledad, que acaba estallando. Y su hija adolescente Meghan, que está terminando sus estudios de secundaria en un elitista colegio privado y preparándose para entrar en la universidad, empieza a cuestionarse si las cosas son como se las han contado…
Conocimos a Frank Bascombe en el ya lejano 1986 con El periodista deportivo y sus andanzas nos han ido mostrando las transformaciones de Estados Unidos en las últimas décadas. Reaparece ahora con 74 años y arranca su relato con esta frase: «Últimamente, me ha dado por pensar en la felicidad más que antes.» A continuación, hace un repaso sucinto de su vida: perdió a un hijo, a sus padres y a algún otro ser querido; ha pasado por dos divorcios; ha sobrevivido a un cáncer; recibió un disparo en el pecho y ha superado huracanes y una depresión.
Ahora, al final de su vida, se ve convertido en cuidador de su hijo Paul, que padece ELA y está recibiendo tratamiento en la Clínica Mayo de Rochester, Minnesota. Cuando le dan el alta, padre e hijo deciden emprender un viaje hasta el emblemático monte Rushmore, evocando otro que Frank hizo de niño, con sus progenitores.
Norteamérica −con Trump en el horizonte− desfila por la ventanilla del coche y se suceden los encuentros con personajes variopintos, mientras padre e hijo aprenden a conocerse. Frank pasa revista a su vida llena de altibajos y cambios, y trata de encontrar en ella algo de sentido y esperanza, atisbos de felicidad.
Richard Ford retorna −con toda probabilidad por última vez− a su personaje más emblemático para construir otra monumental «gran novela americana».
En 1937, Mitxel deja Guernica para unirse al Ejército de Euskadi en la defensa de Bilbao. Poco sabe de una guerra que lo dejará sin madre, sin hermano y sin casa, y que guiará sus pasos hasta Mora de Toledo.
Allí María es la única superviviente de su familia. Nunca olvidará al joven miliciano que le arrancó a su hermano de los brazos. Desde 1937 hasta 1977, de la Guerra Civil a las elecciones generales tras el franquismo, las vidas de Mitxel y María se van entrelazando mientras recorren, sin conseguir olvidar sus pérdidas, su dolor, la historia de un país marcado por un conflicto que todos, de una u otra manera, acabaron perdiendo.
Radio España Independiente, la emisora del PCE en el exilio y la ciudad de Bucarest también serán testigos del dramático acontecer de los dos protagonistas durante la Guerra Fría y el gobierno de Nicolae Ceausescu, cuya policía política, la Securitate, provocará un imprevisto desenlace.