Isidore Beautrelet, estudiante y detective aficionado, no atrapará a Arsène Lupin. Pero su intervención en los asuntos del ladrón acabará trágicamente para Lupin. En medio de la noche, unos desconocidos desvalijan el castillo del conde de Gesvres. Su secretario resulta muerto y uno de los ladrones, herido. Cuando llega la policía no falta ningún objeto ni pueden encontrar al ladrón baldado que se esconde en la propiedad. Isidore Beautrelet, enigmático estudiante de retórica, se propone desentrañar el misterio. Todo parece llevar la firma de Arsène Lupin.
Un duelo a muerte entre el mejor detective de la historia de la literatura y el ladrón más brillante, caballeresco e intrépido que habita los anaqueles.
Arsène Lupin se ve envuelto en dos robos y una estafa. Las tres víctimas deciden unirse y llamar a Herlock Sholmès para que viaje desde Londres y ponga las cosas en su sitio. Sholmès descubre tres secretos que están a punto de perder a Lupin: los túneles ocultos por los que se mueve, el pseudónimo con el que vive entre la gente honesta, y su amor apasionado por la hija del arquitecto Destange. Pero las tornas se vuelven y Lupin no solo consigue escapar de Sholmès sino que lo envía prisionero en un barco de vuelta a Inglaterra.
Por eso, cuando el barón d'Imblevalle —a quien Lupin ha despojado de una lámpara judía donde guarda las joyas de la familia vuelve a llamarlo a Francia, Sholmès está preparado para la venganza.
La novela narra la historia de David Kepesh, quien se convierte en un pecho de 155 libras. Durante la novela, Kepesh enfrenta una lucha interna: parte de él desea sucumbir a sus deseos carnales, mientras que otra parte desea ser un ser racional. Kepesh, un profesor de literatura, compara su desdicha con la de Gregor Samsa en La metamorfosis de Kafka y la de Kovaliov en La nariz de Gógol. Asimismo, describe sus sensaciones sexuales mientras los enfermeros lo cuidan y cómo su novia practica sexo oral en su pezón.
Primer volumen de la serie Mundodisco de Terry Pratchett.
En un mundo plano sostenido por cuatro elefantes impasibles -que se apoyan en la espalda de una tortuga gigante- habitan los estrafalarios personajes de esta novela: un hechicero avaro y torpe, un turista ingenuo cuyo fiero equipaje le sigue a todas partes sostenido por cientos de patitas, dragones que solo existen si se cree en ellos, gremios de ladrones y asesinos, espadas mágicas, la Muerte y, por supuesto, un extenso catálogo de magos y demonios...
En esta serie de novelas se dan cita todos los temas y situaciones del género fantástico, vistos a través del personalísimo y corrosivo sentido de la comicidad de un autor inglés que se ha convertido en uno de los escritores de humor de mayor éxito y fama en el mundo.
Pídeme lo que quieras o déjame es el tercer volumen de la serie erótica más morbosa y adictiva de Megan Maxwell.
Judith y Eric regresan de su viaje de novios tras una boda de ensueño. Él se siente el hombre más feliz del universo y no se imagina su vida sin ella; sin embargo, los celos y el afán de protección de Eric los enfrentan una y otra vez. Por su parte, Judith está encantada con su Iceman particular y siempre intenta verlo todo por el lado positivo, aunque en más de una ocasión se llene el cuello de ronchones... Disfruta de Eric y de sus juegos sexuales, excepto cuando él le susurra que uno de sus mayores deseos es tener un hijo con ella.
Una historia de amor, plagada de morbo y erotismo, en la que los protagonistas luchan por preservar su relación, a pesar de que el precio que tendrán que pagar por ello sea demasiado alto.
Un homenaje de Danielle Steel a las mujeres fuertes que no se dejan vencer por las adversidades.
Kait Whittier escribe una columna en una revista femenina por la que se ha ganado el respeto de sus lectoras. Tras dos matrimonios fallidos, quiere evitar las complicaciones de volverse a enamorar. Para ella lo más importante son su trabajo y sus hijos, con los que disfruta enormemente a pesar de que ya están construyendo sus propios caminos.
Su vida da un giro inesperado cuando conoce a un productor de Los Çngeles que la anima a escribir para la televisión. Inspirándose en su abuela, una mujer indomable, Kait firma un guion gracias al que se zambulle en el glamuroso mundo de las estrellas.
A medida que los secretos de los miembros del reparto empiezan a salir a la luz, la amistad entre ellos crece. Y cuando Kait deba enfrentarse al dolor más grande que una madre pueda imaginar, contará con el apoyo incondicional de esta nueva familia.
¿Existen las segundas oportunidades? Una boda frustrada. Un cálido reencuentro. Esta es la historia de Alex y Emma.
Junto a sus dos mejores amigas, Emma deja atrás la ciudad de Nueva York y viaja a California con el firme propósito de pasar las vacaciones con un cóctel en la mano, bajo el sol, en las cálidas playas de la costa. Un plan perfecto. O al menos lo fue hasta que se encontró con Alex, el chico que no solo le rompió el corazón sino que, además, la dejó plantada una semana antes de subir al altar para darse el «sí, quiero».
Por desgracia, Alex sigue siendo irresistible. Y, aunque Emma siente debilidad por su mirada azul y su sonrisa canalla, no está dispuesta a volver a caer en sus redes. Todo quedó atrás. Él quedó atrás. Así es como deben ser las cosas. El problema es que «querer» no siempre es suficiente y a veces hay recuerdos que pesan demasiado.
«¿Existen las segundas oportunidades? Si eres de las que piensan que el amor no siempre es dos más dos, sino algo así como sesenta y tres por cuatro, divido entre ocho y multiplicado por infinito, tienes que conocer la historia de Alex y Emma».
Tras un desengaño amoroso, Elisa está decidida a retomar las riendas de su vida e ir tachando propósitos de su lista de objetivos: seguir siendo la mejor en su empleo, casarse, formar una familia, mudarse a una bonita casa a las afueras… ¿El problema? Todavía no ha conocido al futuro padre de sus hijos. Pero ella no es de las que se rinden tras un fracaso y tiene muy claro qué tipo de hombre desea a su lado. Para empezar, uno que no se parezca en nada al abogado con el que debe competir en su trabajo, ese que está poniendo a prueba toda su paciencia.
Jack Helker es tan atractivo como borde. A pesar de su sonrisa insolente y de que es el típico hombre que debería venir con un cartel en la frente en el que pusiese «no tocar», Elisa es incapaz de ignorar el deseo que siente cada vez que él está cerca. Y, entre rocambolescas citas, Froot Loops y noches imprevistas, empezará a reconsiderar que a veces «perder el control» también tiene sus ventajas.
«Quizá la princesa no encuentre a un caballero a lomos de un corcel cuando se asome a la ventana de la torre, pero tal vez sí tropiece con un seductor chico de ojos grises el día que se atreva a dejar atrás los seguros muros del castillo».
«Una mañana, al despertar de un sueño intranquilo, Gregorio Samsa se encontró en la cama transformado en un insecto monstruoso. Estaba acostado sobre la espalda, que era dura, como acorazada, y levantando un poco la cabeza pudo ver su vientre convexo, color pardo, dividido por unos arcos rígidos; la manta había resbalado sobre esa superficie y solo una punta lo cubría todavía. Sus patas numerosas, de una delgadez lamentable en relación con el volumen del cuerpo, se agitaban frente a sus ojos.»
Así comienza una de las ficciones más célebres de la literatura del siglo XX. Pieza clave dentro de su producción literaria, La metamorfosis es una vasta y vívida pesadilla donde gravita una intensidad ejemplar. Las ilustraciones del gran artista argentino Luis Scafati recrean admirablemente los peculiares ambientes y tortuosos personajes de este relato, invitando al lector a una aventura memorable.