Daniel Samoilovich y Stupía han colaborado en numerosos proyectos: desde una efímera revista poética en los años setenta hasta la codirección del periódico trimestral "Diario de Poesía" entre 1992 y 2011.
Con marcados rasgos autobiográficos, Klaus Mann nos presenta en El volcán la desgarradora imagen de un grupo de exiliados del régimen nazi. Estructurada a partir de las vivencias de una pareja de homosexuales, uno de los cuales se identifica habitualmente con el propio autor, los protagonistas se convierten, además, en portavoces de los movimientos culturales e ideológicos de su tiempo: el surrealismo, el humanismo liberal y católico, el esteticismo, el antifascismo idealista y militante y, con todo ello, quizá sea ésta la gran novela europea sobre el destierro, sobre el vacío al que el exilio lanza a sus víctimas un espacio en el que el paso del tiempo es sustituido por la disolución de la propia identidad, que queda en suspenso.
Un grupo de jóvenes activistas y hackers de diferente procedencia se presenta al concurso a la mejor innovación nórdica con un proyecto para recopilar datos de cualquier sistema y crear conexiones con el big data. No logran resultar premiados, pero al final del evento reciben un misterioso encargo para recabar datos sobre un medicamento y su uso en pacientes de distintos lugares del mundo. El grupo acepta sin saber apenas nada de quién les ha hecho un encargo tan bien retribuido ni para qué servirán sus resultados. Poco a poco se irán desvelando algunos engranajes de la interacción entre el sector farmacéutico y el dinero.
Francia, verano de 1944. Con nueve años, Mainou acaba de perder a su madre mientras daba a luz a su hermana pequeña. El compungido padre se ve obligado entonces a enviar a Mainou a Lorena, con su abuela, al otro lado de la línea de demarcación, escondido en un carro de heno. Allí, en la granja familiar, tratará de retener los últimos suspiros de su infancia mientras la realidad lo empuja a evadirse: el miedo, la pena, la guerra. Junto a esa familia que aún no conocía, y a los misteriosos sucesos que los rodean, el niño se confía a la imaginación para atravesar el duelo y sobrevivir a los últimos meses de la Segunda Guerra Mundial.
¿Es cierto que los hijos de Joseph Goebbels fueron asesinados en el búnker del Führer? ¿Es cierto que fue su propia madre, Magda, quien los mató poco antes de quitarse la vida? ¿Y si no fue así?
Ignacio Padilla juega con la posibilidad de que los seis niños pudieran haber salido con vida del búnker. No sólo eso, imagina los destinos que cada uno pudo haber vivido y sus identidades reconstruidas ya siendo adultos. Alguna podría haber vivido en el puerto de Malombrosa (el puerto imaginario de su Espiral de artillería) o en Argentina. Quizás uno de los pequeños escapó por una serie de túneles que lo alejaron de una muerte segura. Una de las hijas, tal vez, se convirtió en una promesa de los escenarios, en una prima donna.
Casi una década después de Para acabar con Eddy Bellegueule, su ópera prima, que se convirtió en un sorprendente fenómeno internacional, Édouard Louis regresa con un nuevo texto autobiográfico que nos permite medir el alcance del camino recorrido desde una infancia marcada por la miseria económica, moral y cultural hasta la vida adulta en los elegantes barrios de París. Una fascinante y conmovedora historia de aprendizaje y metamorfosis para escapar de la pobreza, la violencia y la exclusión.
Dotado de una trágica lucidez y de una franqueza asombrosa, Cambiar: método es probablemente el libro más tierno y melancólico de Édouard Louis, una forma de odisea personal que no es sino el fruto maduro de una permanente, insaciable y terapéutica búsqueda de la felicidad.