Ver como
Ordenar por
Mostrar por página
Imagen de LA HUESPED DE LA CASA AMARILLA
1,300 975

LA HUESPED DE LA CASA AMARILLA

Tenerife, islas Canarias, 1940. Tamara lleva media vida al servicio de los Finley, una familia de origen británico afincada en la isla que dirige un hotel de lujo y una hacienda platanera. Un mes después de la extraña desaparición de su padre, la joven criada recibe en la hacienda a una huésped muy especial, Erika Hoffmann, antropóloga alemana de prestigio a la que debe asistir durante su estancia. Lo desconcertante son los motivos secretos que han llevado a esta mujer a Canarias, pero, sobre todo, que la científica se aloja en la Casa Amarilla, una pequeña vivienda atrapada entre las fincas de la hacienda que lleva años cerrada y a la que los empleados tienen prohibida la entrada. Para Tamara es un lugar maldito, pues su padre le contó todo tipo de historias sobre ese sitio. Y las leyendas parecen ser ciertas. A partir de este momento, las vidas de Tamara y de Erika cambiarán para siempre.
1,300 975
Imagen de TEXTOS RECOBRADOS I 1919-1929
1,300 975

TEXTOS RECOBRADOS I 1919-1929

Alguna noche, suelo ubicar mis horas en la serenidad del barrio de Almagro: empresa que tiene su poco de catástrofe en cada punta, pues para ir y volver es obligatorio descender a la tierra como los muertos e incluirse en una hilera de ajetreos que hay entre la plaza de Mayo y la estación Loria, y resurgir con una sensación de milagro incómodo y de personalidad barajada, al mundo en que hay cielo. Claro está que esas plutónicas y agachadas andanzas tienen su compensación: tal vez la más segura es poder considerar ese grande y bien iluminado plano de Buenos Aires que ilustra las paredes enterradas de los andenes. ¡Qué maravilla definida y prolija es un plano de Buenos Aires! Los barrios ya pesados de recuerdos, los que tienen cargado el nombre: la Recoleta, el Once, Palermo, Villa Alvear, Villa Urquiza; los barrios allegados por una amistad o una caminata: Saavedra, Núñez, los Patricios, el Sur; los barrios en que no estuve nunca y que la fantasía puede rellenar de torres de colores, de novias, de compadritos que caminan bailando, de puestas de sol que nunca se apagan, de ángeles: Pueblo Piñeiro, San Cristóbal, Villa Domínico.
1,300 975
Imagen de BESAME, QUE DIRE QUE HA SIDO MALA SUERTE
1,300 975

BESAME, QUE DIRE QUE HA SIDO MALA SUERTE

El libro estará organizado en 13 apartados que hacen referencia a la buena o mala suerte («El gato negro», «La sal derramada», «No cruzar debajo de una escalera», «Levantarse con el pie izquierdo», «Tijeras abiertas» o «El color amarillo»). En palabras del autor: «La vida está llena de momentos que no podemos controlar, cuando la suerte es nuestro acompañante de viaje. Nos enamoramos, no se elige. Tan solo puedes vivirlo. Es incontrolable». Bésame, que diré que ha sido mala suerte».
1,300 975