Hace ya tiempo que Emmanuel Carrère ha acostumbrado a sus lectores a esperar de él lo inesperado, y en esta obra monumental, casi diríamos épica y sin duda radical, aborda nada menos que la fe y los orígenes del cristianismo. En sus páginas se entrecruzan dos tramas, dos tiempos: la propia vivencia del autor, que abraza la fe en un momento de crisis personal marcado por una compleja relación amorosa y el abuso del alcohol, y la historia de Pablo el Converso y de Lucas el Evangelista. Dos historias entrelazadas sobre la fe en las que se suceden abundantes personajes, episodios y reflexiones.
Lo que a Carrère le interesa del cristianismo es su mensaje de transgresión de lo establecido y la desmesura de la fe. Y este libro provocador y deslumbrante es una indagación rabiosamente contemporánea sobre el cristianismo que nos habla de la perplejidad, el dogma, la duda, la redención y la construcción de una fe con mensajes rupturistas y extraños rituales.
Daisy Patel es una ingeniera de software que entiende las listas y la lógica mejor que cualquier jefe o novio. Con toda su vida planeada y sin ningún interés en el amor, lo único que no puede ofrecerle a su familia es el matrimonio que todos esperan. Al no tener demasiadas opciones, le pide al chico del que estaba enamorada en su juventud que finja ser su prometido.
Liam Murphy es un inversor que tiene algo que demostrar. Cuando se entera de que su herencia depende de que se case, se da cuenta de que la hermana menor de su mejor amigo tiene la solución perfecta a su problema. Un matrimonio de conveniencia haría que Daisy se quitase de encima a sus parientes casamenteros y que Liam cumpliera las condiciones del testamento de su difunto abuelo. Ojalá no le hubiera roto el corazón nueve años atrás…
Pero las chispas entre Daisy y Liam saltan tras una serie de citas para legitimar su relación falsa… Y se dan cuenta demasiado tarde de que su acuerdo no es muy conveniente que digamos. Está más que claro que la historia y la química no van a seguir las reglas de este compromiso.
Julián es un joven sacerdote que abandona su Santiago natal para ejercer de capellán en los Pazos de Ulloa. Allí encuentra un mundo primi-tivo y brutal, muy alejado de sus expectativas. La de los Ulloa es una casa en decadencia, donde reinan la lujuria y la deslealtad. Guiado por su ingenuidad, Julián se propondrá devolver los Pazos a la vida noble y cristiana, una iniciativa que tendrá consecuencias inesperadas. Emilia Pardo Bazán escribió Los Pazos de Ulloa cuando ya era una autora consagrada y en ella ensayó el naturalismo por el que abogaba. Un magnífico estudio de ambientes y personajes que hizo de esta la obra cumbre de la gran dama de las letras españolas.