El esquema de esta novela es de genial simplicidad. Se configura como una sucesión de escenas dialogadas entre dos presos recluidos en una misma celda de una prisión bonaerense. Así, Molina, un homosexual de gran imaginación, irá relatando viejos melodramas cinematográficos a Valentín, activista político e idealista, para aliviarle de los efectos de las sesiones de tortura a que lo somete la policía política de la dictadura.
A través de esta larga conversación, Puig lleva a sus últimas consecuencias uno de sus más originales procedimientos narrativos: el empleo de elementos de la cultura pop como correlato objetivo de las vivencias de los protagonistas. La confrontación entre los dos hombres los llevará a una profunda transformación interior que desembocará finalmente en un sacrificio con el que llegarán a ser ellos mismos.
En 1992, la ya anciana Chiyo Uno publicó la historia de Kazúe, una muchacha que, tras protagonizar una indiscreción amorosa, acaba escapando de su hogar. La narradora la sigue hasta Tokio, describe su vida hasta pasados los treinta y cinco años y se pregunta, en una suerte de hipnótico vaivén, las razones por las que Kazúe obró, decidió y sintió. El efecto es de una fuerza sorprendente y las frases cortas, sincopadas y estrictas parecen intentos de respuesta, siempre provisionales, a esa incesante inquisición.
ENTRÓ EN EL INFIERNO DISPUESTA A PERSEGUIR SUS DEMONIOS.
NUNCA PENSÓ QUE UNO DE ELLOS EXIGIRÍA SU CORAZÓN.
La vida de Ares ha cambiado en poco tiempo. Ahora sabe el legado que corre por sus venas y conoce su misión: proteger a su ciudad y a su familia de la incursión de una Corte de Bacus plagada de demonios.
Ares quiere venganza y para ello deberá infiltrarse como pareja virtuosa de Adonis en las fiestas báquicas, unos rituales sexuales exclusivos en honor a Bacus. Juntos tendrán que enfrentarse a un peligroso juego que pondrá precio a sus almas, dejándose arrastrar por una espiral de tentación y deseo que jamás habían experimentado.
PECADOS. VICIO. PLACER.