Pirineos, años cuarenta. Sol Mentruit debe huir de su pueblo y refugiarse entre un grupo de contrabandistas en Andorra por haber presenciado un asesinato. Una vez allí, entra en una red de evasión en la que empieza a llevar documentación sensible al consulado británico de Barcelona. En medio de sus viajes se enamora de Max Schell, un francés estrafalario e intelectual del que descubrirá que es un oficial alemán. Cuando el líder de la red, Quim Baldrich, se entera de la relación entre Sol y Max, la expulsa, pero ella decide realizar un último acto para demostrar su lealtad y llevar a un grupo de refugiados a cruzar los Pirineos de Toulouse a Barcelona para salvarlos. Diferentes historias se irán entrecruzando hasta confluir en ese momento que resultará definitivo para todos.
Tras una exhaustiva documentación y partiendo de recuerdos transmitidos por su familia, el célebre autor siciliano revive, en una historia de humor amargo, las masacres de 1848 en Sicilia oscurecidas por las autoridades y olvidadas por los historiadores.
La primera masacre tuvo lugar en Porto Empedocle, donde el mayor Sarzana liberó de un solo golpe a 114 prisioneros, los asfixió y los quemó vivos en una celda común; el segundo tuvo lugar en Pantelleria, donde quince agricultores fueron ejecutados por acusaciones de mafiosos y terratenientes. Las autoridades, las borbónicas y las unitarias confundieron y ocultaron su suerte, y ningún historiador se ocupó jamás de ellas. Los asesinos y cómplices silenciosos hicieron sus carreras, primero bajo los Borbones y luego en la Italia unificada.
Una trama familiar que alcanza un gran aliento épico para reflejar las turbulencias de la historia española y europea del siglo xx.
En el año 2018, en busca de un clima más soleado y benigno, Primi e Isabelle, un matrimonio belga de clase media, deciden comprar una casa en la Costa Brava catalana. La propiedad, en los alrededores de Tossa de Mar, está muy próxima a un antiguo hotel, Casa Johnstone, que durante la Guerra Civil fue adaptado por sus propietarios como refugio para un nutrido grupo de niños republicanos, algunos de ellos procedentes de Mequinensa, en la Franja catalano-aragonesa. Primi, que es hijo de españoles emigrados a Bélgica en los años sesenta, acaba descubriendo que entre esos niños estuvieron su propio padre y su tío.