De vacaciones en la localidad bretona de Crozon, la joven editora Delphine y su marido, escritor, visitan una peculiar biblioteca que alberga los libros rechazados por las editoriales. Allí encuentran una obra maestra: Las últimas horas de una historia de amor, novela escrita por un tal Henri Pick, fallecido dos años antes. Pick regentaba una pizzería junto a su viuda, Madeleine, y según ella nuna leyó un solo libro y mucho menos escribió nada que no fuera la lista de la compra. ¿Tenía el autor una vida secreta?
Se conoce por «juego de guerra» aquel que recrea y simula un enfrentamiento armado a cualquier nivel, sujetándose a reglas para el desarrollo del mismo. El alemán Udo Berger es campeón de esta disciplina en su país. Los juegos de guerra son al tiempo su profesión y su obsesión; ocupan su vida e invaden su pensamiento a todas horas. Incluso durante el viaje que realiza con su novia Ingeborg a la Costa Brava, donde él había veraneado en su infancia, se hace instalar una gran mesa en la habitación del hotel para pensar en las estrategias de su nuevo juego, El Tercer Reich.Una noche, sin embargo, Udo e Ingeborg conocen a otra pareja de alemanes, Charly y Hanna, que les introducirán a un mundo oculto tras las playas y el sol. Un mundo poblado por personajes de dudosa reputación, pasados oscuros y futuros aún más enigmáticos.
Los sinsabores del verdadero policía empezó a escribirse en los años ochenta de la mano de un Roberto Bolaño entregado aún a la poesía y desconocedor todavía del legado que había de dejar en los años venideros. El punto final a la presente obra, sin embargo, lo rubricaría veinte años después, en los últimos días de su vida.A lo largo de este período, Bolaño va recogiendo o apuntando por primera vez los nombres y los escenarios que se repetirían en otras obras como Estrella distante, Llamadas telefónicas y Los detectives salvajes. Así, desfilan por estas páginas, perdidos en la ficticia y terrible ciudad de Santa Teresa, el exiliado académico chileno Óscar Amalfitano, su hija Rosa, un sevillano a quien los rusos cortan la lengua, un escritor francés llamado Arcimboldi -que nos recuerda al literato desaparecido en 2666- todos ellos hilos sueltos pero intrincados de la trama que compone esta «novela endemoniada», muestra paradigmática del talante más vanguardista de su autor.