En 1990,Javier Sierrafue abordado por un sujeto singular en el Museo del Prado. Este le confesó que existía una comunidad secreta que, desde hacía siglos, se había dedicado a proteger una selección de obras que servía de puerta entre distintos mundos. Aquel tropiezo dio lugar a El maestro del Prado(Planeta, 2013).
Desde entonces, el autor se ha obsesionado con encontrar de nuevo a ese personaje y, en su camino, ha descubierto que existe un«plan maestro»que otorga al arte un sentido esencial. Este lleva siglos siendo urdido por unos misteriosos maestros que han transformado a nuestra especie hasta límites insospechados. Algunos mitos se refieren a ellos como dioses instructores, otros como daimones; también como ángeles y espíritus.Sus ideas han moldeado nuestra especie con aportes como la agricultura, la astronomía, las matemáticas o la expresión artística.
Soy plenamente consciente de que al no ser un hombre de letras, ciertas personas presuntuosas puedan pensar que tienen motivos para reprochar mi falta de conocimientos. ¡Necios! Acaso no saben que puedo contestarles con las palabras que Mario dijo a los patricios romanos: “Aquellos que se engalanan con las obras ajenas nunca me permitirán usar las propias”. Dirán que al no haber aprendido en libros no soy capaz de expresar lo que quiero tratar; pero se dan cuenta de que la exposición de mis temas exige experiencia más que palabras ajenas. La experiencia ha sido la maestra de todo buen escritor; por eso será ella la que yo citaré como nuestra». Ciencia, Filosofía, Arte, Literatura... son algunos de los muchos temas que abarca la presente selección del Cuaderno de notas de Leonardo, el hombre más universal del Renacimiento.
LEONARDO DA VINCI nació en 1452 en Vinci (Florencia). Arquitecto, pintor, escultor, ingeniero y sabio italiano heredero de todas las aspiraciones artísticas del Quattrocento florentino, aporta conclusiones geniales a la investigación de su siglo. A partir del siglo xvi, fue considerado como una especie de «mago». A pesar de que muchas de sus obras se han perdido o no están acabadas, la importancia de su obra es inmensa.
En Orlando (1928), Virgina trata temas considerados tabúes en su época, como la sexualidad femenina, la homosexualidad así como el papel de la mujer en la sociedad del momento. Narra la historia de Orlando, un joven noble que, viviendo durante varios siglos, tiene cambios de género pasando de ser hombre a ser mujer.
Como consecuencia de dos artículos leidos a mujeres en 1928, Virginia entró en la dimensión politica feminista. En la lucha contra el rol tradicional de la mujer en la sociedad: la relegación de la mujer era la escena doméstica, la presión que recibe para someterse a las ideas patriarcales y la negación de que tuviese sus propias ganancias y su intimidad. «Si una mujer va a escribir, tiene que disponer de dinero y de una habitación propia».
Tras cinco años de matrimonio y el nacimiento de su hijo Ramsés, Amelia Peabody y su marido Radcliffe Emerson han cambiado las aventuras arqueológicas en Egipto por una casa georgiana con jardín en la Inglaterra victoriana. Amelia, que nunca ha sido una dama convencional, afronta su flamante vida doméstica con más resignación que entusiasmo, pero la inesperada muerte de sir Henry altera sus planes hogareños. La viuda, lady Baskerville, acude a la pareja para que se pongan al mando de la excavación que capitaneaba su marido, quien había descubierto una tumba real intacta en Luxor. Pero a la muerte de sir Henry se suman otros extraños sucesos y empieza a circular el rumor de que una maldición se cierne sobre la tumba del faraón.
Hannah Swensen no tiene tiempo para aburrirse. Cuando no está atendiendo a la clientela de su panadería The Cookie Jar, está impartiendo clases de cocina para adultos en el Instituto Jordan o intentando encontrar el ingrediente secreto de unos cupcakes de chocolate. Todos en Lake Eden creen que Hannah tiene un imán para los crímenes, pero cuando descubre un cadáver dentro de un contenedor de basura le resulta muy difícil mantenerse al margen. Primero, porque la víctima tiene el pecho manchado del glaseado de uno de sus cupcakes y, segundo, porque se trata del sheriff Grant, el rival directo de su cuñado Bill para el puesto de sheriff y el principal sospechoso. Secretos del pasado, mentiras inconfesables y maquinaciones oportunistas son los ingredientes de este caso.
Cuando el anciano Mordecai Artemus fallece, todo el mundo en Old Town se muere por entrar a husmear en su mansión. Mientras Natasha Smith,la diva domestica de la televisión local, ve la oportunidad de convertir la mansión en la casa de muestra del Colegio de Interioristas, Sophie Winston se contenta con coordinar la feria de decoración y jardinería de la localidad. La sorpresa llega cuando Sophie descubre que el fallecido la ha elegido como organizadora de una particular velada para el reparto de su herencia. Para colmo, sucumbe al juego de Natashay acaba encargándose de la redecoración de la estancia predilecta de Mordecai. Sophie tendrá que ponerse manos a la obra, y no solo con la reforma, si no quiere verse implicada en un caso de asesinato.