Una comedia romántica ambientada en Los Angeles con una peculiar banda musical como protagonista.
Jonathan Lethem recrea las peripecias de una banda indie de escaso éxito en Los Ángeles.
Lucinda, la bajista del grupo, trabaja en una oficina de reclamaciones. El trabajo es muy aburrido, pero hay un cliente que tras varias llamadas acaba seduciéndola con sus brillantes reflexiones subidas de tono.
Matthew, el cantante de la banda, vive obsesionado por la tristeza de una canguro del zoo y está a punto de tomar una decisión desesperada.
Bedwin, el genio apocado del grupo, sufre un bloqueo creativo que le impide escribir nuevas canciones y cree que la solución se encuentra en algún fotograma de Deseos humanos.
Y Denise, que es el alma del grupo, está decidida a hacer lo que sea necesario para que la banda salga adelante.
Un buen día, en un ensayo, Lucinda improvisa unas frases inconexas: el germen de una canción. Cuando Bedwin las transforma en un tema de éxito, el grupo salta a la fama. Pero esto solo traerá más problemas.
Del autor de Huérfanos de Brooklyn llega esta pertida novela rebosante de sexo, música y humor.
«Encuentra a Jimena. La nada, aquí».
Madrid, 1889. Largas lenguas de fuego desdibujan la solidez arquitectónica del Gran Hotel Inglés. Entre la muchedumbre, el humo, los escombros y el caos, Elvira Pardo Losada detiene la camilla sobre la que los bomberos trasladan a uno de los heridos. Se trata de Leonardo, su gran amigo, cómplice de sus verdaderos impulsos por la escritura. La mujer se acerca asustada para escuchar lo que su amigo le intenta decir. Malherido, acierta a esbozar unas palabras y le encomienda la que puede ser su última voluntad. Contrariada y herida, víctima de una traición doble, decide viajar al pazo de Mariñán, en Galicia, para cumplir su promesa, encontrar a Jimena, y aprovechar la distancia para escribir. Sin embargo, una vez allí, el misterio no será solo dilucidar el paradero de la joven, sino que todos guardan secretos en un lugar donde la nada parece ser la única realidad palpable.
La ciudad semi-sumergida de Tiankawi, habitada por humanos y seres del agua, parece ser un refugio seguro para quienes huyen de los disturbios civiles. Sin embargo, en realidad, los humanos viven en la parte superior de la ciudad, mientras que los habitantes de las profundidades, como sirenas, brujas marinas y kappas, residen en las aguas contaminadas de abajo.
Cuando Mira, medio sirena, es ascendida a capitana de la guardia fronteriza, ve en ello una oportunidad para ayudar a los oprimidos. Sin embargo, su trabajo se complica en el momento en el que Nami, una princesa dragón de agua, es exiliada a la ciudad bajo su vigilancia. Poco después, un grupo de extremistas sabotea un festival, la violencia estalla y los derechos de los habitantes de las profundidades se ven amenazados. Entonces, Mira y Nami deberán decidir si vale la pena pagar el coste del cambio o si Tiankawi debería ser abandonada.