En una antigua zona de marismas de la capital islandesa, aparece flotando en un estanque el cadáver de un vagabundo. Como a casi nadie le importa su muerte, la policía archiva rápidamente el caso. Un problema menos. Sin embargo, un joven agente llamado Erlendur, que conocía al mendigo de sus rondas por el corazón de la ciudad, empieza a obsesionarse con las circunstancias del trágico suceso. Hay varios detalles que indican que no se trató de un simple accidente y Erlendur tiene la firme convicción de que todos merecen justicia.
Un escritor de éxito recibe una extraña carta el día de su cumpleaños. Esa misiva sin firmar contiene el testimonio de una vecina que se enamoró de él hasta la médula hace años, siendo ella adolescente, pero él, por más que lo intenta, no es capaz de recordarla. Al profundizar en esa confesión que abarca toda una vida, sufrimos por los sentimientos no correspondidos de ella, pero también por la soledad y la carencia de empatía de él. Stefan Zweig, magistral retratista de las emociones, nos ofrece el retrato duro y descarnado de un amor absoluto, incondicional, secreto y obsesivo que se ha convertido, por derecho propio, en todo un clásico de la literatura del siglo XX.
La misteriosa Helen Graham se instala con su hijo en la mansión de Wildfell Hall y desencadena todo tipo de rumores entre sus vecinos. Tras liberarse de un esposo alcohólico y pendenciero, Helen se enfrenta ahora a una sociedad opresora, pero sale adelante gracias a su buen juicio y su sentido del deber. La búsqueda de la felicidad y de la justicia por parte de su protagonista convierte La inquilina de Wildfell Hall, la segunda (y última) novela de Anne, la menor de las hermanas Brontë, en un lúcido retrato de las miserias humanas, una hermosa novela de amor, un canto a la redención y un ilustre precedente de la literatura feminista.
Un ladrón inteligente e ingenioso que cautiva con su carisma y generosidad. Un accidentado robo en un castillo desata la búsqueda de un tesoro mítico. Lupin ha conseguido hacerse con un secreto milenario. Solo el ingenio y la sagacidad del aprendiz de detective, Isidore Beautrelet, podrán desbaratar sus planes. Una nueva aventura del maestro de la novela policíaca francesa, protagonizada por uno de los personajes más camaleónicos y encantadores que ha dado el género.
Parejas de enamorados, jinetes sin cabeza y aldeanos que duermen siestas de décadas confluyen en un díptico que parece al mismo tiempo realismo mágico y terror costumbrista. En estos dos relatos, Sleepy Hollow, o La leyenda del jinete sin cabeza, y Rip van Winkle, se encuentra la simiente del llamado Gótico Americano, que convirtió a Washington Irving en el primer escritor de una literatura genuinamente estadounidense, porque toda nación recién creada necesita nuevas leyendas, nuevos mitos, nuevos símbolos; en resumen, unas señas de identidad propias.
Publicada en 1928, Romancero gitano es una de las creaciones poéticas más importantes del siglo xx. En esta obra, compuesta por dieciocho romances en los que prima un uso exquisito de la metáfora, se tratan temas universales como la muerte, el amor y la pasión, todo ello con la cultura gitana como eje central. En él se dan la mano tradición y modernidad en un libro profundo, intenso, con una personalidad única que se traduce en pura armonía. Una obra maestra que sigue emocionando al lector como el primer día.