Las obras que encumbraron a Theodor Kallifatides como uno de los grandes escritores europeos de la segunda mitad del siglo xx fueron sus tres novelas Campesinos y señores (1973), El arado y la espada (1975) y Una paz cruel (1977), que ahora se traducen por primera vez al español. Con ellas, Kallifatides retrató su infancia y su adolescencia y a la vez el período más trágico de la historia contemporánea de Grecia, el que va desde que los nazis invaden el país en 1941 hasta el fin de la guerra civil griega en 1949, y la miseria de la posguerra en un país devastado. En El arado y la espada, los habitantes de Yalós parecen poder respirar tranquilos, tras la llegada del ejército británico y el fin de la Segunda Guerra Mundial. Pero pronto resuena de nuevo el estruendo de las armas. En el vacío de la postguerra, los fascistas toman el poder y grupos de partisanos resistentes, que ya combatieron contra los nazis, se enfrentan a ellos. La familia de Minos, el niño protagonista de la trilogía, emerge en primer plano: el tío Stelios, contador de historias y anécdotas sin fin, el maestro liberado de las cárceles nazis que por fin puede reunirse con su familia, Minos y su primer amor por una niña judía, Rebeca, los hermanos mayores, que huyen a las montañas para unirse a la resistencia contra el fascismo, y la madre, cuyo valor y fortaleza es el soporte de todos ellos.
Habitamos un tiempo crepuscular: crisis económicas, guerras, pandemias, malestar cultural... Asistimos al auge de discursos políticos asentados sobre la melancolía y la nostalgia de un pasado que fue mejor, incapaces de efectuar una interpretación con sentido del propio presente. Un futuro cancelado y un pasado que echamos de menos. En todos ellos se observa un repliegue de impotencia reaccionaria, agravio y resentimiento. Y, por encima de todo, una necesidad punzante: volver a casa.
Hoy, se da una respuesta melancólica a ese malestar que recorre la derecha y la izquierda. En El tiempo perdido, con la ayuda de Proust y algunos filósofos y filósofas, Clara Ramas nos propone una salida diferente. El melancólico se aferra al objeto amado y quiere volver a una Edad Dorada ―la patria, el orden, los roles de género y de clase, la vida mejor de nuestros padres, la Transición, la Tradición―. Pero el retorno es imposible para nosotros, seres finitos, hablantes y modernos. Estamos siempre de camino, pero nunca del todo en casa. Pese a todo, quizás existe una milagrosa posibilidad de «recobrar el tiempo», pero ciertamente no será la que prometen los nuevos melancólicos y las fuerzas reaccionarias.
Después de la caída del Muro y la disolución de la República Democrática Alemana, Erich Honecker encuentra refugio en Santiago de Chile, donde regatea con la muerte y el juicio de la historia. Patricio Dupré, chileno y ex refugiado en Alemania Oriental, se ve envuelto en una trama estremecedora al conseguir un trabajo como traductor del líder del régimen que socavó sus sueños juveniles cuando estudiaba Filosofía en la Karl-Marx-Universität de Leipzig. En eso está cuando se reencuentra con Valentina Bode, su antiguo amor de juventud, joven de la cual fue separado por el Muro. Han pasado los años, ella no es ya la misma y esconde oscuros secretos vinculados al Partido Socialista Unificado germano, los cuales motivan su viaje al fin del mundo.
Roberto Ampuero narra a tres voces: la de Honecker, Dupré y Bode. Contrapone sus visiones y desentraña la madeja de un amor víctima de las intrigas internacionales. Nunca volveré a Berlín se revela como una novela de espías y de un amor imposible y, sobre todo, como testimonio profundamente humano sobre una época que sigue generando debate. La Guerra Fría ha terminado y el autor nos adentra en los últimos meses de vida del secretario general del PSUA en su aislado refugio chileno, donde convergen sueños, frustraciones y secretos.
Basada en hechos verídicos, esta apasionante novela cuestiona algunos de los tópicos más difundidos en torno a la vida del almirante, como su nacimiento en Génova, su condición de judío converso o el que llegó a América por casualidad.
En Santo Domingo, República Dominicana, los restos de Cristóbal Colón desaparecen misteriosamente de su tumba. Un extraño jeroglífico es la única pista dejada por los saqueadores…
El mismo anagrama aparece en la fachada de la catedral de Sevilla, y los restos que allí se conservaban también han sido robados…
Tres investigadores saben que no se trata de un simple expolio: el jeroglífico estampado en ambos mausoleos es la enigmática firma que usaba el almirante.
Esta será la clave para resolver el enigma, y llevará a un final inesperado que cambiará la visión de la humanidad sobre el hombre que unió dos mundos.
El mundo de Mistborn llega a la segunda era.
Han transcurrido trescientos años desde los acontecimientos de la Trilogía Original Mistborn. Kelsier y Vin han pasado a formar parte de la historia y la mitología, y el mundo de Scadrial se halla a las puertas de la modernidad.
Sin embargo, en las tierras fronterizas conocidas como los Áridos, las antiguas magias todavía son una herramienta crucial para quienes defienden el orden y la justicia.
Uno de esos vigilantes de la ley, Waxillium Ladrian, deberá regresar a la capital para retomar sus obligaciones como líder de una casa noble. Pero pronto descubrirá que la ciudad puede ser más peligrosa que las salvajes llanuras de los Áridos.
Un thriller aterrador y absolutamente adictivo.
Salamanca, otoño de 2019. A través de un potente programa informático que permite cruzar datos de los diversos cuerpos policiales, seis estudiantes universitarios tutelados por el catedrático de Criminología Salomón Borges acaban de descubrir la existencia de un misterioso homicida, oculto durante tres décadas, cuyo modus operandi consiste en escenificar composiciones renacentistas encolando los cuerpos de sus víctimas.
Al mismo tiempo, la joven teniente Lucía Guerrero, miembro de la elitista Unidad Central Operativa de la Guardia Civil, acaba de descubrir a su compañero crucificado y encolado en una colina de las afueras de Madrid. Un crimen inusitado y atroz que la llevará a conocer a Salomón Borges y a recorrer con él la geografía española, desde las calles de Salamanca hasta Segovia y el Pirineo de Huesca, en busca del abominable asesino.
Con Salamanca y la España de hoy como telón de fondo, Bernard Minier nos ofrece un thriller donde todos los personajes se enfrentarán a su propio destino, sus terrores más profundos y una verdad mucho más turbadora que la de cualquier relato mitológico.