Esta es la historia de una niña que creció en una época y un lugar en los que el alma estaba subyugada al Estado, la belleza inspiraba desconfianza y el amor podía ser castigado con la muerte. De cómo acabó en un campo de trabajo donde se la destinó a la recolección de algodón y de su relación con una compañera de su misma edad, con quien desafió en secreto todas las normas de la moral revolucionaria. Es la historia de una caída y una reden ción, y un viaje de pasión, peligro, suerte y traición. Es, en definitiva, un retrato esclarccedor de la China de Mao y de una mujer que vivió para contarlo
La buena terrorista sigue los pasos de Alice Mellings, una mujer que transforma su casa en el cuartel general de un grupo de radicales de izquierdas que desearían colaborar con el IRA. Mientras Alice lucha por conciliar su ideología con su educación burguesa, sus compañeros encuentran retos inesperados en su activismo por el cambio social y contra el capitalismo.
La visión ricamente matizada que aporta Doris Lessing al conflicto entre lo personal y lo político hace de La buena terrorista un retrato fascinante de la vida doméstica y la rebeldía.
«Una novela magnífica, de un realismo dinámico y escrupuloso, absolutamente contemporánea."
Tite Washington Post Book World
¿Qué pasa en nuestro interior cuando leemos una novela? Este libro nos lleva a los mundos del escritor y del lector y pone de manifiesto las íntimas conexiones entre ambos. Pamuk recurre a la famosa distinción de Friedrich Schiller entre poetas «ingenuos» (los que escriben con espontaneidad, serenidad y naturalidad) y poetas «sentimentales» (reflexivos, emotivos, inquisidores y sensibles al artificio de la palabra escrita). Remontándose a las novelas de su adolescencia y deteniéndose en las obras de Tolstói, Dostoievski, Stendhal, Flaubert, Proust, Mann y Naipaul, el autor explora la oscilación entre lo ingenuo y lo reflexivo, así como la búsqueda del equilibrio que se encuentra en el corazón mismo del oficio de todo novelista.
La casa de las bellas durmientes sobresale en la obra de Yasunari Kawabata por su perfección formal. Comienza con la visita del viejo Eguchi a una casa secreta gobernada por una mujer ordinaria y práctica que, al final, como él mismo, revelará su esencia inhumana. En ese burdel, el protagonista, de sesenta y siete años, pasa varias noches junto a los cuerpos de jóvenes vírgenes narcotizadas. A la vez que admira el esplendor de las figuras dormidas, rememora su relación
con las mujeres: su esposa, su madre, su amante, sus hijas...
Erotismo, lujuria masculina, vejez y violencia se entretejen en esta fulgurante novela breve que amalgama, como es típico en la obra del Premio Nobel de Literatura, motivos tradicionales de la estética japonesa con temas modernos
en ambientes casi irreales. Magnífica pero profundamente perturbadora, La casa de las bellas durmientes es una escalofriante meditación sobre la sexualidad y la muerte.
«Breve, bella y profunda, La casa de las bellas durmientes deja en el ánimo del lector la sensación de una metáfora cuyos términos no son fáciles de desentrañar.» Mario Vargas Llosa
Bertrand Arthur William Russell (1872-1970), filósofo, pedagogo, matemático y ensayista inglés, se guió en esta obra por el más ajustado sentido de la unidad histórica y estudió a cada filósofo en relación con el medio en que actuó, teniendo siempre en cuenta las circunstancias sociales y políticas de su época. De este modo ha conseguido acercar al lector a la génesis yel desarrollo del pensamiento occidental.
En este primer torno se aborda la filosofía presocrática, las aportaciones de Sócrates, Platón y Aristóteles, la filosofía helenística ya los Padres de la primera filosofía católica.
Jesús Mosterín analiza en su Introducción la trayectoria biográfica y la evolución del pensamiento de este gran filósofo: su rebelión contra el idealismo vigente; el desarrollo del logicismo aplicado a las matemáticas y al conocimiento empírico; su faceta de filósofo práctico y su trabajo en la historia de la filosofía que tendrá como resultado esta obra.