¿Qué amenaza entrañan las mujeres que deciden vivir su propia vida?
Inglaterra, 1643. Rebecca West vive con su madre en una casa destartalada, en la miserable aldea de Manningtree. Se las arreglan para ganarse la vida como costureras, pero los tiempos son difíciles. La mayoría de los hombres están fuera luchando en guerras y la comida suele escasear. La única perspectiva de esperanza o felicidad para Rebecca reside en un posible matrimonio con el joven que le enseña a leer cada tarde. Sin embargo, el fervor puritano que se ha apoderado de la nación persigue a marginados, pobres, mujeres solteras y todo aquel que pueda parecer «diferente». La llegada de Matthew Hopkins, un adinerado y misterioso individuo, abrirá una red de sospechas y originará un ambiente de desconfianza en el pueblo. Cuando un niño cae enfermo con síntomas inusuales, la madre de Rebecca será detenida y acusada de brujería junto con otras mujeres. Atrapada entre la traición y la persecución, ¿qué debe hacer Rebecca para sobrevivir?
Militza y Stana, hijas del empobrecido rey de Montenegro, se ven forzadas a casarse con dos miembros de la aristocracia rusa para que su padre pueda recuperar parte de su poder.
La vida, a pesar del esplendor de la corte del zar Nicolás, no es fácil. Una de ellas, Militza, parece tener poderes ocultos y siente fascinación por todo lo que tenga que ver con la magia y el espiritismo. Ante una influenciable zarina Alexandra, que haría cualquier cosa para darle al país el heredero que está esperando, despliegan su relación con el más allá, y entre sesiones de espiritismo, pócimas engañosas y coqueteos con la magia negra, logran hacerse con un gran poder en la corte.
Sin embargo, cuando den con Rasputín, precisamente en la búsqueda de un hombre con poder espiritual, descubrirán que quizás han ido demasiado lejos.