Cuando Ignacio despierta en mitad de la noche y descubre que alguien ha secuestrado a su bebé, todo cuanto ama se derrumba.
La inspectora Bru, víctima de un brutal asalto en el pasado, y el teniente Israel, que convive con un grave problema familiar, deberán sobreponerse a sí mismos y cooperar entre ellos para encontrar al niño antes de que sea demasiado tarde. Los primeros pasos de la investigación y una oscura leyenda les harán pensar que este secuestro no es como otros. Detrás se esconde algo terrible y doloroso, una verdad difícil de asimilar.
Este frenético thriller reflexiona sobre la infancia y el origen de la personalidad mientras policías y criminales recorren los lugares más sombríos de Valencia, la ciudad donde nunca se pone el sol. Olvida lo que sea que hayas leído hasta ahora y contén la respiración: en breve comenzarás a gritar.
Una inquietante desaparición. Una pasión que siempre vuelve. Una leyenda que atraviesa el tiempo.
Blanca Oliveira pronto se arrepentirá de haber regresado al caserón familiar del monte Abantos donde hace trece años desapareció su hija Alba sin dejar rastro. A los pocos meses de instalarse allí con Ricardo, con quien acaba de casarse en segundas nupcias, y las dos hijas que le quedan de su primer matrimonio, desaparece otra de ellas. La historia se repite: la edad de las niñas; el inspector de policía encargado de resolver el caso; la única pista: una cinta roja hallada en el jardín; la muerte de un caballo y el cuento de hadas relacionado con la historia de la familia que pesa sobre cada uno de sus miembros como una maldición.
Cristina López Barrio se embarca en una impactante trama coral donde el suspense y la intriga policiaca se entremezclan con el poder de los lazos familiares, la fantasía de los cuentos de hadas y las trampas de la pasión.
En este libro crudo y tierno, entre la emoción y la dureza, los recuerdos se ligan a los ritmos de las rondas infantiles. Llega el momento en la vida en que los juegos y cantos pierden su inocencia. Una muchacha educada, pero también traviesa, que toca el piano, practica esgrima y se pelea con su hermana, transita la traumática experiencia que separa la niñez de la adolescencia. El despertar del cuerpo y el encanto por lo prohibido pautan las rondas de una niña que se quiere comer y «amanecer al mundo / desflorada a besos». La Biblioteca Elena Poniatowska reúne la obra narrativa, ensayística y periodística de la autora que ha explorado con maestría el género que ha tenido enfrente. En Rondas de la niña mala la poesía evoca los fogosos años de la juventud y el descubrimiento de la sensualidad y sus delirios.