In her second story collection, Sittenfeld shows why she’s as beloved for her short fiction as she is for her novels. In these dazzling stories, she conjures up characters so real that they seem like old friends, laying bare the moments when their long held beliefs are overturned.
In “The Patron Saints of Middle Age,” a woman visits two friends she hasn’t seen since her divorce. In “A for Alone,” a married artist embarks on a creative project intended to disprove the so-called Mike Pence Rule, which suggests that women and men can’t spend time alone together without lusting after each other. And in “Lost but Not Forgotten,” Sittenfeld gives readers of her novel Prep a window into the world of her beloved character Lee Fiora, decades later, when Lee attends an alumni reunion at her boarding school.
Hilarious, thought-provoking, and full of tenderness for her characters, Sittenfeld’s stories peel back layer after layer of our inner lives, keeping us riveted to the page with her utterly distinctive voice.
En un islote llamado Shutter Island, frente a la costa de Boston, se alza un conjunto de edificios de aspecto siniestro: se trata de un hospital psiquiátrico cuyos internos, todos hondamente perturbados y sometidos a una vigilancia estricta, han cometido algún crimen grave. El agente federal Teddy Daniels y su ayudante, Chuck Aule, son enviados allí porque una de las reclusas, Rachel Solando, parece haberse evadido de algún modo incomprensible de una celda cerrada a cal y canto. La única pista es una hoja de papel con una serie de números y letras sin significado aparente.
Mientras un furioso huracán azota el peñón, los dos policías se adentran en un mundo cada vez más opaco y angustiante, entre indicios de experimentos radicales y maquinaciones gubernamentales encubiertas que ensombrecen un caso ya de por sí extraño. A medida que su investigación avanza, las preguntas aumentan: ya no se refieren tan solo a la mujer desaparecida, sino a la naturaleza de todo lo que sucede en ese lugar rodeado por una valla electrificada y guardias armados. Y, cuanto más se acercan a la verdad, ésta se vuelve cada vez más esquiva, hasta el punto de hacerles creer que tal vez nunca puedan abandonar Shutter Island.
A veces la huida es la única opción posible.
A veces no hay más remedio que renunciar al amor.
Pero cuando no queden más lugares a los que escapar, ¿serás capaz de volver al principio?
Blakely lleva tiempo sumida en una espiral de éxito, conciertos, drogas y alcohol junto con su grupo de rock indie Baby Blue Eyes. Hasta que un día comprende que todo este torbellino la está ahogando y toma la decisión de desandar el camino. De volver al punto de partida. De regresar a Green Falls. Allí la esperan su familia, la casa que un día fue su hogar y, tal vez, también Silas, a quien partió el corazón diez años atrás. El chico al que siempre quiso dedicar la canción de amor más bonita del mundo.
Como una de esas baladas capaces de conmovernos hasta las lágrimas, Si decides volver es una novela sensible y emotiva, una historia de amor que ya nunca podrás olvidar.