Justo antes del amanecer, en una decadente ciudad americana, cientos de parados esperan la apertura de la oficina de empleo para reclamar uno de los mil puestos de trabajo que se han anunciado. Han hecho cola durante toda la noche. De pronto, invisible hasta que lo tienen prácticamente encima, un Mercedes surge de la fría niebla de la madrugada. Su conductor atropella y aplasta a todos los que encuentra a su alcance. Acto seguido, el coche da marcha atrás y vuelve a arremeter contra ellos. El asesino huye dejando atrás ocho muertos y quince heridos. Meses después, Bill Hodges, un policía jubilado que sigue obsesionado con este caso sin resolver, recibe una carta anónima de alguien que se declara culpable de la masacre. Brady Hartsfield vive con su madre alcohólica en la casa donde nació. Disfrutó tanto de aquella sensación de muerte debajo de los neumáticos del Mercedes que ahora quiere recuperarla.
Lanzada de nuevo a la popularidad por la versión cinematográfica que de la obra hiciera en 1993 el actor y director Kenneth Branagh, "Mucho ruido y pocas nueces", compuesta en 1598, fue ya en su día una de las comedias más celebradas de William Shakespeare (1574-1616). Situada en su mayor parte en un amable marco de jardines, aposentos y fiestas cortesanas, la obra gira principalmente en torno a dos fuertes personajes enfrentados, Benedicto de Padua y Beatriz, adversarios irreconciliables y ambos tan ingeniosos, mordaces y sarcásticos como desdeñosos del amor. A lomos de una trama animada por los equívocos, las traiciones y los imprevistos, los enemigos jurados acaban sin embargo, para su propia sorpresa, en aquel lugar a donde se prometieron nunca ir a parar y, lo que es más, en la compañía para ellos más insospechada.
Hércules Poirot necesita descanso, y para ello ha escogido un pequeño hotel junto al mar. El relax y la armonía reinan entre los huéspedes. Arlena Marshall, una actriz descaradamente bella y con un talento especial para atraer problemas, se convertirá en el objeto de deseo de los hombres y en el centro de las críticas de sus mujeres. Cuando aparece muerta, todos parecen tener una buena coartada. Poirot hará gala de su astucia para resolver un crimen en el que ni los malos son tan malos? ni los buenos tan buenos.
«La mejor Agatha Christie desde Diez negritos.» The Observer
En abril de 1657, tras ser encarcelado en varias ocasiones y merecer castigos cada vez más severos por parte del tribunal de la Inquisición, el fraile Diego La Matina pasó de la exasperación a la locura hasta, finalmente, asesinar al inquisidor del reino de Sicilia, Juan López de Cisneros. Sin embargo, el caso del hereje La Matina, envuelto en la oscuridad, distorsionado por la leyenda, nunca llegó a esclarecerse, pues jamás se supo el «pecado» por el que fray Diego fue condenado en sus inicios. Vivamente interesado por este caso, y «porque la Inquisición está lejos de haber dejado de existir en el mundo», Leonardo Sciascia examinó los documentos de la época para averiguar cuál fue la herejía de fray Diego. Tal vez, se plantea Sciascia, fray Diego fue un hombre avanzado a su tiempo, con una visión poco ortodoxa del Evangelio y que murió víctima de los efectos no deseados de la represión del Santo Oficio, que «lograba hacer de un hombre religioso un hombre absolutamente irreligioso, radicalmente ateo».
Durante unas placenteras vacaciones en Egipto, el detective Hércules Poirot coincide con Linnet y Simon, unos conocidos suyos que están de luna de miel en el país de los faraones. El encanto de tan maravillosos días se rompe cuando una mañana, en el transcurso de un crucero por el Nilo, la bella Linnet aparece muerta de un disparo en la cabeza. ¿Será capaz Poirot de encontrar al asesino de la joven esposa? ¿Será capaz de discernir entre imaginación y realidad, aun estando a bordo la ex pareja de Simon, empeñada desde el mismo día de la boda en arruinar su matrimonio con la desafortunada Linnet? El misterio está servido.
Durante unas placenteras vacaciones en Egipto, el detective Hércules Poirot coincide con Linnet y Simon, unos conocidos suyos que están de luna de miel en el país de los faraones. El encanto de tan maravillosos días se rompe cuando una mañana, en el transcurso de un crucero por el Nilo, la bella Linnet aparece muerta de un disparo en la cabeza. ¿Será capaz Poirot de encontrar al asesino de la joven esposa? ¿Será capaz de discernir entre imaginación y realidad, aun estando a bordo la ex pareja de Simon, empeñada desde el mismo día de la boda en arruinar su matrimonio con la desafortunada Linnet? El misterio está servido.
Desde el asiento número nueve, Poirot está idealmente ubicado para observar a los demás pasajeros del avión. A su derecha se sienta una mujer joven, claramente enamorada del hombre de enfrente. Más adelante, en la butaca número trece, se encuentra una condesa con una pasión por la cocaína mal disimulada. Al otro lado del pasillo, en el asiento ocho, una abeja agresiva molesta a un escritor de novelas de detectives. Sin embargo, Poirot no se da cuenta de que, detrás suyo, en la segunda butaca, se halla el cuerpo sin vida de una mujer.
¿SEDUCIR O SER SEDUCIDO? ¿MORDER... O SER MORDIDO?
No todos los días se encuentra una con un vampiro desnudo en la carretera. Pero no todo el mundo es Sookie Stackhouse, camarera rompecorazones, amiga de vampiros, aventurera en contra de su voluntad y telépata. Para más inri, resulta que él no tiene ni idea de quién es. Sin embargo, Sookie sí: es Eric, el vampiro más poderoso (y sexy) del Área 5. Pero ahora es un Eric más amable, dulce y vulnerable. Y muy asustado, porque sabe que quien le quitó la memoria ahora quiere su vida.
Incapaz de no ayudarlo, Sookie se pone manos a la obra, pero su investigación la conduce a una peligrosa batalla entre brujas, vampiros y hombres lobo. Pero además podría haber un mayor peligro: y es que esta versión de Eric es alguien muy difícil de resistir...
Charlaine Harris ha creado en esta serie unas novelas adictivas, divertidas y que han marcado un antes y un después en el mundo del romance paranormal. No querrás perderte un solo párrafo...
Ahora les toca a los licántropos y cambiaformas seguir el ejemplo de los no muertos y revelar su existencia al mundo. Sookie Stackhouse ya los conoce, por supuesto: es amiga de la manada local, su hermano se convierte en pantera con la luna llena y Sam, su jefe en el bar Merlotte's, es un cambiaformas.
Al principio todo da la impresión de ir bien, pero entonces aparece el cadáver mutilado de una mujer pantera en la puerta del bar. Sookie sabe que nadie merece una muerte tan horrible, así que acepta utilizar su talento telepático para localizar al asesino. Pero no se da cuenta de que hay un peligro mucho mayor que el asesino que amenaza Bon Temps: una raza de seres no humanos, más antigua, más poderosa y mucho más reservada que los vampiros o los hombres lobo, se prepara para la guerra...