Divertida, sexy,fashiony un poco aterradora.
Segunda entrega de Pandora English, una fascinante serie de fantasía ambientada en el glamuroso mundo de la alta costura.
Ya han pasado dos meses desde que Pandora dejó su pequeño pueblo natal y se instaló en la mansión encantada de Spektor. Gracias a su tía abuela y Luke -el espíritu de un alférez muerto hace doscientos años, pero al que Pandora encuentra enormemente atractivo-, está empezando a entender la importancia del legado de la familia Lucasta, que su madre siempre le ocultó.
Aunque el don excepcional que ha heredado conlleva una gran responsabilidad, en el mundo de los mortales Pandora no encuentra la manera de sobresalir ni de que su jefa se dé cuenta de sus cualidades.
Un asesinato sacude el exclusivo mundo del arte. El influyente empresario Sten Hammar ha sido hallado muerto en su mansión a las afueras de Estocolmo. Las primeras pistas apuntan a un robo: Hammar era un coleccionista importante y en su villa atesoraba antigüedades de valor incalculable. La detective Karin Klinga se hará cargo del caso y en su investigación topará con la dura y lacónica Majja Skog, la experta a quien la casa de subastas Wallius ha confiado la tasación de las piezas de la colección del magnate. Lo que nadie sabe es que Majja y Hammar compartían un pasado: él fue su mentor, el hombre que la introdujo en el mundo del coleccionismo... y también alguien que ocultaba oscuros secretos.
¡Última entrega de la serie La Discípula Oscura!
El mundo de Krynn siempre tiene sorpresas para los incautos, pero la revelación de que una mortal, que primero dedicó su vida al Dios Único y
luego a Chemosh, es a su vez una diosa, rebasa todos los límites conocidos.
Para Mina, signifi ca caer en la locura al conocer la verdad.
Los dioses están soliviantados porque Mina tiene el potencial de romper el equilibrio de poder en el cielo. Los dioses de la Oscuridad y de la Luz se muestran ansiosos por tenerla como una de los suyos. Pero Mina, siempre misteriosa y enigmática, tiene sus propios planes, sin que le importe lo que los dioses puedan querer o planear.