Mayo, 1936. Una joven viaja a un pequeño pueblo de la sierra gaditana donde desempeñará, por primera vez, su vocación y profesión: la de maestra.
Eulalia —o Lali, como la llaman sus alumnos— se prepara para dar clase a un grupo de niños y niñas. Nerviosa, repasa los modernos principios pedagógicos que le han inculcado durante la República y que, poco después cuando estalle la Guerra Civil, la condenarán. Acusada de adoctrinamiento, es arrestada y no podrá volver al aula durante la dictadura, convirtiéndose en una de las víctimas de un proceso que afectó a un tercio del cuerpo docente de España. Hasta que treinta años después, una visita inesperada lo cambiará todo para Lali.
Este es el relato de una profesora sin alumnos que luchó durante toda una vida por volver a enseñar. Con esta novela, José Antonio Lucero, renombrado autor de La vida en un minuto y La madrina de guerra rinde homenaje a su profesión y vocación, y nos demuestra que un buen maestro siempre lo será.
La ciudad más bella del mundo ha acogido a maestros del vidrio durante cientos de años. ¿Hay lugar para una mujer entre todos ellos? Orsola Rosso está a punto de dejar su huella.
Venecia, 1486. Al otro lado de la laguna se encuentra Murano. Aquí el tiempo fluye de forma diferente, como el cristal que los maestros de la isla se pasan la vida aprendiendo a moldear. Las mujeres no deben trabajar el vidrio, pero Orsola Rosso ignora las convenciones para salvar a su familia. Trabaja en secreto, sabiendo que sus obras deben ser perfectas para ser aceptadas por los hombres. Pero la perfección puede llevar toda una vida. Saltando a través de los siglos, seguimos a Orsola Rosso mientras perfeccionan su arte a través de la guerra y la peste, la tragedia y el triunfo, el amor y la pérdida.
Namoo es un afamado idol que, ante los ojos de cualquiera, tiene la vida perfecta: una carrera en ascenso, fanáticas que lo idolatran y un departamento en el barrio más exclusivo de Seúl. Sin embargo, de un día a otro, su carrera queda destruida tras golpear a un desconocido en una tienda de conveniencia. Y todo por culpa de una rata escondida en un bolsillo.
Minwoo es un profesor de física desempleado y un apasionado de la astronomía que, además, está obsesionado con los números 3, 6 y 9. Es, también, el dueño del ratón responsable de destruir la carrera del artista Lee Namoo.
Ahora Namoo deberá limpiar su nombre y para ello tendrá que buscar al responsable de todos sus problemas y pedirle ayuda, el más grande de los favores. Pero ¿podrá entenderse con alguien que solo sabe hablar de física, que tiene una mascota horrible y no quiere su dinero?