Un grupo de jóvenes amigos decide armar un plan para evitar la muerte de León Trotsky, aunque eso implique viajar en el tiempo.
Un grupo de jóvenes amigos, de orientación trotskista, decide armar un operativo demencial: viajar en el tiempo para matar a Ramón Mercader, verdugo histórico de su venerado político ruso. Uno de ellos, el Gordo Felipe, un genio de la computación, es la piedra basal del proyecto que implica una computadora, vestuario de época, documentos falsos y un análisis minucioso de la historia, centrada en agosto de 1940 en Coyoacán, en la ciudad de México, cuando ocurre el asesinato. Contada desde los distintos puntos de vista de los participantes del operativo, Todos nosotros es la nueva novela deKike Ferrari -quien se dio a conocer con su libro anterior,Que de lejos parecen moscas- y la confirmación de su talento como narrador.
¿Cuándo se está realmente preparado para empezar a vivir?
¿Cuál es el momento adecuado para volverse a enamorar?
Ander y Olivia son dos extraños que coinciden por azar una noche en Barcelona. Ambos, cada uno a su manera, luchan por encontrar su lugar y arrastran fantasmas del pasado que les impiden superar sus errores y miedos. Cuando se despiden, creen que lo que han compartido ha sido una bonita pero fugaz casualidad y que nunca volverán a encontrarse. Sin embargo, el destino a menudo es caprichoso y pronto sus vidas se verán irremediablemente entrelazadas.
Entre poemas, fiestas universitarias, confesiones susurradas, nuevas amistades, despedidas y atardeceres con conversaciones frente al mar, los dos descubrirán lo difícil que es volver a querer para un corazón hecho trizas, lo que les obligará a enfrentarse a sus propias heridas. Solo así tendrán la oportunidad de descubrir el mundo nuevo, emocionante y a veces aterrador que se abre ante ellos para escribir una historia que hasta ahora no creían merecer.
A VECES, LO ÚNICO QUE NECESITAMOS ES LA OPORTUNIDAD DE VOLVER A EMPEZAR.
David Galán, conocido como REDRY, es uno de los poetas urbanos más queridos. En esta ocasión, además de los textos que hacen honor a su poética habitual y tan apreciada por su audiencia, se enfrenta a un diálogo lírico, creativo y novedoso con sus escritores de cabecera.
El libro está organizado como una travesía habitual de avión, por lo que el vuelo supone la columna vertebral del poemario, en el que cada apartado supone un destino "aéreo" puntual de interlocución poética, en el que Redry se sumerge en la palabra de Benedetti, Chacel, Lorca, Pizarnik, Mistral, Whitman, Machado, Delibes, etc., entre otros muchos creadores, dando "vuelo" a sus propios poemas, inquietudes y emociones.