Tierra de los hombres, publicado en 1939, se compone de ensayos y relatos autobiográficos sobre la participación de Antoine de Saint-Exupéry en la aviación comercial de los años treinta, cuando el emprendimiento se unía a la aventura y el saber práctico a la reflexión filosófica. Destacan los relatos del accidente de su amigo Henri Guillaumet, que logró salir con vida tras estrellarse su avión en la cordillera argentina, y el siniestro del propio autor en 1935 en el desierto del Sahara, donde quedó varado durante casi tres días sin agua ni comida. El conjunto e sun libro de aventuras escrito con un lirismo que celebra la vida.
Gorbensdorf, Baja Silesia, 1913. El joven polaco Miecysław Wojnicz, estudiante de ingeniería, llega al sanatorio local en busca de aire puro y una cura para su tuberculosis. Se aloja en la pensión para caballeros de Wilhelm Opitz, donde coincide con otros enfermos de toda Europa. Por las tardes, entonados por el licor, los huéspedes conversan sobre lo divino y lo humano. ¿Habrá guerra en el continente? ¿Las mujeres nacen inferiores? ¿Existen los demonios? ¿Es preferible la monarquía o la democracia? Al leer un texto cuya autoría se desconoce, ¿puede deducirse si lo ha escrito un hombre o una mujer?
«El ruido de las olas. Los botes meciéndose a lo lejos. El mar es una cosa seria».
Mediados del siglo . En el norte de Chile, un niño aprende a nadar en las aguas del río Loa junto a sus amigos. Posee una destreza y una resistencia respiratoria inusuales que lo llevan a convertirse en buzo pescador en una pequeña caleta, donde comparte faenas con los boteros y aprende a sortear las dificultades del oficio y las inclemencias de la naturaleza, y también a hacer vida de familia. Con el tiempo, se lanzará a competir en torneos de caza submarina y a lucirse en un mundial de la disciplina que se organiza en el país. Todo esto mientras, a lo lejos, se dejan sentir las agitaciones sociales que traerían los años sesenta y setenta.
Tras haber desarrollado una exitosa carrera, Chungungo Martínez –tal es el nombre del protagonista de Tierra de campeones, la tercera novela de Diego Zúñiga– se enfrenta a un descubrimiento que marcará el resto de sus días y lo conducirá a una especie de desértica temporada en el infierno, una deriva tan inesperada como perturbadora.
El problema de buscar la verdad es encontrarla y no saber qué hacer con ella.
Una novela que cambiará tu forma de ver el mundo.
Querido lector,
Tienes en tus manos una novela que plantea preguntas difíciles de responder; una novela que habla sobre esas verdades que, a pesar de buscar, preferiríamos no encontrar. No puedo explicarte de qué trata este libro porque eso rompería su magia, pero te aseguro que, cuando acabes de leerlo, verás el mundo de forma distinta.
Guatemala, 1954. El golpe militar perpetrado por Carlos Castillo Armas y auspiciado por Estados Unidos a través de la CIA derroca el gobierno de Jacobo Árbenz. Detrás de este acto violento se encuentra una mentira que pasó por verdad y que cambió el devenir de América Latina: la acusación por parte del gobierno de Eisenhower de que Árbenz alentaba la entrada del comunismo soviético en el continente.
Tiempos recios es una historia de conspiraciones internacionales e intereses encontrados, en los años de la Guerra Fría, cuyos ecos resuenan hasta la actualidad. Un suceso que involucró a varios países y en el que algunos verdugos acabaron convirtiéndose en víctimas de la misma trama que habían ayudado a construir.
En esta novela apasionante, que conecta con la aclamada La Fiesta del Chivo, Mario Vargas Llosa funde la realidad con dos ficciones: la del narrador que libremente recrea personajes y situaciones, y la diseñada por aquellos que quisieron controlar la política y la economía de un continente manipulando su historia.
«¿Era la historia esa fantástica tergiversación de la realidad?»
Guatemala, 1954. El golpe militar perpetrado por Carlos Castillo Armas y auspiciado por Estados Unidos a través de la CIA derroca el gobierno de Jacobo Árbenz. Detrás de este acto violento se encuentra una mentira que pasó por verdad y que cambió el devenir de América Latina: la acusación por parte del gobierno de Eisenhower de que Árbenz alentaba la entrada del comunismo soviético en el continente.
Tiempos recios es una historia de conspiraciones internacionales e intereses encontrados, en los años de la Guerra Fría, cuyos ecos resuenan hasta la actualidad. Un suceso que involucró a varios países y en el que algunos verdugos acabaron convirtiéndose en víctimas de la misma trama que habían ayudado a construir.
En la ciudad industrial de Coketown el señor Gradgrind dirige una escuela donde se enseña que la vida es «una pura cuestión de números» basada en «hechos» e inculca los mismos principios a sus hijos. Cuando un día sorprende a dos de ellos, Tom y Louisa, espiando entre las barracas de un circo, se enoja sobremanera y les recuerda que la imaginación y el sentimiento son «tonterías destructivas». El fabuloso mundo del circo sirve de contrapartida al sistema despótico y estrictamente regulado de la ideología utilitarista, personificada especialmente en la figura del siniestro banquero Bounderby, y que a lo largo de la trama lo único que prácticamente hace es engendrar canallas y víctimas.
Hijas de matrimonios mixtos, Tracey y la narradora se conocen desde la infancia, son amigas íntimas y comparten el sueño de llegar a ser algún día bailarinas. Sin embargo, su entorno familiar tiende a separarlas: el padre de Tracey está en prisión y su madre la colma de regalos y caprichos, mientras que en casa de la narradora se valoran el esfuerzo y la superación personales, urgida por una madre estricta y solícita. Así pues, a medida que las dos chicas emprenden sus propios caminos, las sutiles diferencias de clase y raza van minando todos los vínculos de confianza y lealtad forjados en la niñez.
Santa Montefiore, la reina del romance épico, une de manera magistral la convulsa historia de Irlanda a lo largo de varios siglos con una trama familiar y romántica que atrapa desde las primeras páginas. Arethusa Clayton siempre fue una mujer muy especial. acostumbrada a salirse con la suya. Ahora ya no está, pero dejó instrucciones precisas de sus últimas voluntades. En vez de ser enterrada en la acomodada Costa Este de EE.UU., donde ella y su difunto marido criaron a sus hijos, Arethusa quiere que sus cenizas sean esparcidas en un lugar remoto de Irlanda, concretamente en unas colinas frente al mar y junto a un castillo. Todo cuanto Arethusa le explicó a su hija Faye es que creció en el seno de una familia humilde y que dejó Irlanda, sola, para empezar una nueva vida en EE.UU., como hicieron tantas personas en tiempos de adversidades. Pero ¿quién era su familia? ¿Dónde están ahora? ¿Y quién es el misterioso benefactor de una parte importante de su testamento? Arethusa ha muerto y no tiene familia cercana que pueda contar su historia. O al menos, no en esa parte del mundo. Por eso, Faye decide viajar al pintoresco pueblo de Ballinakelly, dispuesta a cumplir con el deseo de su madre y descubrir todos los secretos que allí se ocultan.