El silbido vulnerable del jilguero me despierta, a veces, desde la ventana de la habitación. Y, como las gotas condensadas, empiezo a deslizarme por la memoria. Viajo otra vez a la tierra que habité, ahora curtida por el presente, y recuerdo todas las heridas existentes. Creo que fue en ese instante cuando empecé a escribir. O había sido antes, no sé. La memoria a veces es confusa. A veces, sin embargo, no escucho su silbido y hablo con el silencio, que me recuerda las ausencias que no vuelan. Entonces, les escribo y dejo que vuelen sobre el papel.
LA NUEVA NOVELA INCENDIARIA DEL PREMIADO AUTOR DE QUE DE LEJOS PARECEN MOSCAS: un fenómeno de culto cuya adaptación cinematográfica ha ganado la Mención Especial de la 56.ª edición del Festival de Sitges.
Triunfo del esplendor verbal y el sabio arte constructor de Alejo Carpentier, El siglo de las luces es una de las grandes novelas en lengua española de nuestro siglo.
Carlos y Sofia viven en una delirante disciplina de deshoras que les lleva a acostarse con el alba, a comer cuando tienen hambre y a vagar por los pasillos donde se acumulan los muebles apolillados. Víctor Hugues se introduce en sus vidas y se hace indispensable para los adolescentes. Con él entrará la vida y las nuevas ideas del siglo XVIII.
Sentado junto a una ventana con vistas a un lago cuyas aguas indefinidas, letárgicas, pusilánimes e indecisas le parecen fiel imagen de aquellos que, esperando su muerte, lo rodean en su retiro, el juez Casaldáliga ya no recuerda aquella frase que su padre le repetía de niño una y otra vez: «Has de tener bien presente que un hombre no es nada sin un destino». Un destino inconfundible y nítido que él buscó, empecinado, durante mucho tiempo, hasta que, en 1939, al regresar a su país después de un exilio de tres años en Lisboa, vio claro que el final de una guerra cuyas consecuencias ni le interesaban ni le importaban, le brindaba sin embargo una oportunidad para decidir no sólo su destino, sino también el de sus semejantes. El siglo (1983), una novela que se adentra en los mecanismos de la delación y la supervivencia, del dominio y la traición de los semejantes fue, durante mucho tiempo, una de las preferidas de su autor.
El siciliano es una biografía novelada de Giuliano y una incisiva descripción de la vida, las tradiciones y las complejas relaciones de poder en Sicilia. Corre el año 1950. El exilio de Michael Corleone en Palermo está a punto de acabar, y su padre, Don Vito, le ha encomendado una misión: debe volver a América con un hombre que se ha convertido en un mito popular, un forajido acosado por el Gobierno, las clases altas y la Mafia. Su nombre es Salvatore Giuliano, un moderno Robin Hood que, tras enfrentarse en su juventud a una patrulla de carabineri, se vio forzado a refugiarse en las montañas. Desde allí lucha por su patria y su gente, oprimida por la Cosa Nostra y la corrupción del Gobierno de Roma. Ahora, en esta neblinosa tierra de montañas y ruinas antiguas, el destino de Michael Corleone se verá hermanado con la leyenda de Salvatore Giuliano.
Viena, 1894. En un sarcófago del Museo de Historia del Arte de la ciudad aparece, momificado, el cuerpo del profesor Alfons Strössner, uno de los mayores egiptólogos del mundo. El inspector Leopold von Herzfeldt será el encargado de un caso sobre el que parece cernirse una terrible maldición: de los cuatro miembros de la última expedición a la Tierra Negra, tres han fallecido en extrañas circunstancias.
Leo llevará al límite los novedosos métodos de investigación del momento para dar con el culpable; sin embargo, cuando las pistas se agoten recurrirá, una vez más, a Augustin Rothmayer, el sepulturero del Cementerio Central de Viena, y junto con Julia Wolf, ahora fotógrafa forense de la policía, se verán envueltos en un fascinante misterio en el que todos los indicios conducen a Egipto.