En una tierra sin nombre ni tiempo, un hombre llama a la puerta del rey para pedirle un barco con que zarpar en busca de la isla desconocida. Las trabas burocráticas que le ponen, la dificultad para emprender el viaje, la procedencia de la tripulación, los pertrechos necesarios y hasta el sitio de la presunta isla serán el objeto de esta narración en apariencia sencilla, pero que va ganando hondura con cada página.
Sólo al final de una vida sabes cómo y a qué te has adaptado
Esta obra entrelaza dos historias. Por un lado está la fascinante vida del naturalista Charles Darwin, un genio enfermizo que en su tiempo fue tachado de farsante, blasfemo, ignorante y otros muchos defectos por atreverse a argumentar que toda especie, incluyendo la humana, desciende de otra y forma parte de un proceso llamado evolución.
Por otro lado, está la extraña ruta seguida por uno de nuestros contemporáneos, que se considera a sí mismo como el último darwinista y abre un blog en donde exhibe seres humanos que, según propone, son mutaciones de nuestra especie, producidas por los aditivos químicos que desde hace décadas contienen nuestros alimentos y por derivaciones imprevistas del avance tecnológico.
«El cuerpo» es el edificio central de la deslumbrante trilogía CEGADOR. Un libro inabarcable, caleidoscópico e intelectualmente subversivo que constituye un hito en la historia de la literatura europea. Bucarest a mediados de los años 60: Rumanía está dominada por el Partido. Mircea acaba de cumplir ocho años y en su mente se fusionan el presente y el pasado: el lúbrico Vasile, el muchacho que creció sin sombra; la niña Maria, a la que le crecen unas alas de mariposa; las alfombras cúbicas tejidas por la madre de Mircea, que ocultan secretos de Estado; la mística aparición, en la Alameda del Circo, del Hombre Serpiente; Mircea y su hermano Victor, acurrucados cada uno con la cabeza a los pies del otro; los hombres estatua que pueblan las entrañas de una Amsterdam con cielos color rubí…La fabulosa segunda entrega de la trilogía «Cegador», la obra que encumbró a Cartarescu a la fama. Una experiencia literaria total, deslumbrante y transformadora.