“La explicación histórica es, en esencia, una obra de honda reflexión teórica, metodológica y filosófica, además de estimulante, sobre el oficio del historiador, el cual fundamentalmente consiste en indagar sobre el pasado, abrevando en fuentes fiables, reuniendo o seleccionando determinadas pruebas o evidencias, ordenándolas, evaluándolas, contrastándolas con otras fuentes y/o testimonios, para finalmente proceder -mediante la escritura- a la reconstrucción parcial (que nunca podrá ser total) del pasado al que queremos aproximarnos”.
Estructura de los Laberintos de la complejidad conduce al lector
por los escabrosos y cautivantes senderos de la teoría de la complejidad
y del caos. En este excitante paseo, el lector es conducido
de un modo llano, por los distintos conceptos que conforman la
complejidad como disciplina del conocimiento, tales como caos
determinista, efecto mariposa, atractor extraño, reglas sencillas,
emergencia y fractalidad, entre otros. El autor considera que los
sistemas complejos fundamentales funcionan con base en unas
pocas reglas y muy simples. Dichas reglas o componentes básicos
oscilan entre tres y cinco elementos. Al darle continuidad al
principio de simplicidad de la teoría de la complejidad, el autor
se hace las siguientes interrogantes: ¿Existe un número limitado
de componentes en la estructura de los sistemas complejos fundamentales?
¿Es el número de componentes de estos sistemas una
cantidad constante o un intervalo? Si este número fuera un intervalo,
¿Cuál sería dicho intervalo? Se afirma que los sistemas complejos
fundamentales están constituidos por cuatro componentes
fundamentales, o en su defecto, por tres o por cinco. Para este intervalo,
el cuatro es el punto medio del recorrido y simultáneamente,
la moda o número que posiblemente más se repite.
Charamicos, novela ambientada en los terriblemente represivos “doce años” de Joaquín Balaguer, es uno de esos textos que sacude los cimientos de la historia oficial dominicana al proponer una osada visión del Santo Domingo de los años setenta. Charamicos acaba con el mito de la modernidad democrática al retratar con lujo de detalles el sempiterno legado de autoritarismo en el país.