Deja a las personas y futuras generaciones detalles, hasta ahora desconocidos, sobre la realidad de la producción de un gran evento y, al mismo tiempo, se convierte en el primer texto narrativo del autor.
El día más importante de Maritza es un libro impactante y conmovedor que cuenta la historia verídica de Maritza, mujer víctima de violencia psicológica por parte de su esposo durante años. A través de este libro, Maritza relata desde su punto de vista como víctima cómo fue arrastrada a una relación tóxica y, a su vez, cómo poco a poco fue perdiendo su identidad y su autoestima.
¿Cómo puedes reconocer si estás en una relación tóxica y cómo puedes buscar ayuda y apoyo? ¿Cómo trabajar en tu autoestima y en tu independencia después de sufrir abuso emocional? Todas estas y más, son preguntas que tendrá que resolver Maritza por el bien de su familia y por el de ella. ¿Será capaz de salvar a sus hijos y acabar por fin con la espiral de violencia y maltrato?
Durante los inicios de la pandemia, el vertedero de Duquesa fue incendiado misteriosamente. Las autoridades, al poco tiempo, perdieron el interés por investigar este lamentable suceso alegando que era prácticamente imposible saber quién o quiénes lo habían provocado. Ante esto, aparece un vagabundo muy extraño que se hace llamar el detective Jimmy Smith. Este vagabundo, que cuenta con un súper olfato se propone a encontrar quien o quienes son los responsables de incendiar el vertedero, a pesar de que la mayoría de las personas no creen que éste pueda lograrlo.
En 20 capítulos, Manolo Pichardo examina la situación internacional actual y los procesos de cambio que se desarrollan en el concierto mundial. Con base en la metodología exploratoria, Pichardo, en la obra el desplazamiento del poder global hacia un nuevo orden, analiza la deconstrucción de un nuevo orden mundial, marcado por el multilateralismo en el que China jugará un papel fundamental en la emergencia de los países del Sur y el Este.
En este trabajo se trata de mostrar la vida desde fuera de los ambitos habituales de la sociedad, al punto de parecer una apologia a la locura. A esa locura que mora dentro de la anormalidad y que, al margen de la colectividad, asume la vida con una criticidad ponderable de lo que los demas asumen con gran satifaccion.
Quienes sostienen la idea de que el Defensor del Pueblo República Dominicana es unipersonal desconocen los principios generales de la administración moderna, ignoran el proceso de elección como órgano constitucional establecido en la Constitución y pierden de vista las características del Estado social y democrático de derecho. Además, pasan por alto lo que ha significado para la nación dominicana la forma personalista e individualista de funcionarios que han dirigido algunas instituciones como si fuera un feudo heredado de sus antepasados.
El Defensor del Pueblo, por sus características y por las funciones que le asigna la Constitución dominicana, no puede ser una institución unipersonal porque como órgano del Estado, negaría su propia razón de ser el carácter unipersonal es contrario a los principios de la institucionalidad, negaría el principio de la transparencia, incurriría en práctica antidemocrática y estaría promoviendo la corrupción y el tráfico de influencia.
El defensor del Pueblo de la República Dominicana debe ser preservado como una institución democrática, institucional y transparente, alejado del clientelismo y la corrupción. Tenemos que evitar que la práctica corrupta que caracteriza las instituciones de Estado moderno no permee la vida institucional del Defensor del Pueblo y eso solo puede ser garantizado por un ejercicio transparente que descanse en manos de un equipo de hombres y mujeres que hayan sido celosamente elegidos por el Congreso, que su funcionamiento interno descanse en un órgano de control interno, debidamente fiscalizado por los órganos constitucionales encargados de vigilar el buen uso de los recursos públicos.
Los artículos que versan en este libro refulgente del "danilismo efectivo", bien podrian ser un faro de luz que conduzca a puerto seguro a los que navegan en los mares tempestuosos de la envidia, de la insinceridad y del allante.
El autor no encierra entre los barrotes del miedo, los conceptos que libera en estas paginas acerca de los que viven de la política, a muchos de los cuales reconoce sus virtudes y , a otros, les enseña que ésta es una ciencia para el bien, y como tal, debe ir en provecho de los necesitados, con afecto y desinterés.
Este no es un libro de análisis. Es una obra de amor, y si de algo me culpo es de no haber acertado a escribirlo con toda la pasión de que es susceptible la naturaleza humana.