al y como lo plantea el mito del Ave Fénix, es posible resurgir de nuestras cenizas sin importar los fracasos anteriores. En una época de gran incertidumbre, con un entorno complicado de alta inflación, tanto individuos como empresas de todo tipo están obligados a reinventarse, si es que quieren sobrevivir y salir fortalecidos. Pero no todos lo logran a menos que sepan cómo hacerlo. Brian Tracy, autor bestseller experto en desarrollo personal, nos muestra que, sin importar la problemática que nos aqueje, es posible levantarse de nuevo si incorporamos a nuestra vida diaria las doce cualidades de la gente exitosa que enseña en estas páginas.
Samuel Edward Konkin III (SEK3), padre del movimiento agorista, falleció en 2004 dejando sin terminar sus proyectos más extensos y ambiciosos, a excepción del Manifiesto neolibertario. Entre ellos, el inacabado pero apasionante tratado que titula Contraeconomía, publicado en español también por Unión Editorial.
Con el fin de reivindicar la valía del corpus konkiniano, y siguiendo los pasos de la edición original de Kopubco (2006), ampliamos este Manifiesto neolibertario con una serie de valiosos escritos. En primer lugar, la Teoría de clases agorista, que le debemos al teórico Wally Conger, seguidor de Konkin, quien respetuosamente recupera y amplía las notas de SEK3 –fruto de otro proyecto incompleto– en relación a la lucha de clases desde el punto de vista agorista.
En Contraeconomía, Samuel Edward Konkin III, el creador, principal activista y teórico del agorismo, presenta los medios más poderosos para que te liberes, te protejas e incrementes tu riqueza y, en el proceso, liberes al resto de la sociedad. Contraeconomía pretendía ser su obra maestra, la destilación de todo su trabajo e investigación a lo largo de 15 años de activismo en el movimiento. Lamentablemente, de los 18 capítulos esbozados, sólo se escribieron diez. De ellos, sólo seis habían sido encontrados al momento de esta publicación. En el volumen presente, se reconstruye el contenido del libro que hubiera podido ser y no fue, añadiendo, además, como apéndice, un breve pero estimulante ensayo titulado “Desde los callejones hasta las estrellas”.
Los hombres rana son Navy seal que han demostrado valentía inigualable, adaptabilidad y resistencia ante los desafíos, por lo que se les han encomendado las misiones más importantes, como audaces rescates en altamar. Después de casi 40 años de carrera, el almirante McRaven, autor de esta obra, fue condecorado como Bull Frog, que es el más alto honor al que aspira un hombre rana y que habla del memorable legado que deja. A lo largo de su trayectoria, superó inimaginables situaciones de crisis, así como dilemas éticos que lo llevaron a aprender grandes lecciones de liderazgo, como: Quien se atreve gana. Escucha a tus tropas, a tu equipo. Ningún plan sobrevive al primer contacto con el enemigo.
Los economistas se han sentido atraídos desde hace mucho tiempo por la ambiciosa búsqueda de las leyes generales del capitalismo. David Ricardo, por ejemplo, predijo que la acumulación de capital conduciría al estancamiento económico y la desigualdad, a medida que una proporción cada vez mayor de la renta nacional acabase en manos de los terratenientes; Karl Marx siguió sus pasos al pronosticar la inevitable depauperación del proletariado, y Thomas Piketty, en El capital en el siglo XXI, emula a Marx en el título, el estilo expositivo y la crítica del sistema capitalista, proponiendo una audaz teoría de la desigualdad aplicable a todas las economías capitalistas.
¿Cómo sabemos que la Tierra es redonda? ¿Cómo se ha desmontado el terraplanismo a lo largo de los siglos?
Para convencernos de que la Tierra es redonda -aunque todavía hay quien lo duda-, los científicos de todas las épocas han tenido que poner a prueba su ingenio: desde Eratóstenes, que en el siglo III a. C. calculó con una exactitud sorprendente el diámetro y circunferencia de la Tierra midiendo sombras de obeliscos y, quizá, estimando lo que tardaría un camello en ir de Siena a Alejandría, a las primeras fotografías de la Tierra vista desde la Luna que tomó la tripulación del Apolo 8 y conmocionaron al mundo. Esta es la historia de una aventura científica de más de 2.000 años plagada de errores, grandes logros y algunos golpes de suerte.