La sabiduría es la madre de todas las virtudes. La necesitamos para poner en práctica con lucidez el coraje, la disciplina o la justicia, porque la sabiduría nos da perspectiva, nos descubre la verdad, nos muestra cómo funciona el mundo y nos guía.
El discernimiento, esa habilidad crítica tan poco habitual, no es un don innato. La sabiduría se cultiva. La sabiduría se gana. La sabiduría se conquista con esfuerzo.
¿Puede un simple rompecabezas enseñarnos cómo funciona el universo? Sí, si lo guía Cumrun Vafa.Detrás de las sofisticadas ecuaciones que describen la gravedad, la luz o el tiempo, laten ideas simples y poderosas. Este libro propone una aventura singular: entender esas grandes verdades a través de pequeños retos. Más de cien rompecabezas cuidadosamente elegidos, con sus soluciones comentadas, nos abren la puerta a los principios más profundos de la física y las matemáticas.Cumrun Vafa, una de las mentes más influyentes de la física teórica actual, propone un viaje intelectual que va de la intuición al conocimiento, del juego a la comprensión. Desde las leyes de Newton hasta la teoría de cuerdas, pasando por agujeros negros, simetrías ocultas o la relatividad de Einstein, La simplicidad del universo convierte la complejidad en una forma de asombro accesible.Este no es un libro para especialistas, sino para curiosos. No exige ecuaciones, solo imaginación. Porque, como defiende Vafa, las grandes teorías científicas no se construyen sobre tecnicismos, sino sobre ideas claras y bellamente sencillas.«Este libro ofrece un recorrido fascinante y poco usual por algunas de las ideas más avanzadas de la física y las matemáticas, ilustradas con rompecabezas sencillos y entretenidos. Los lectores encontrarán mucho con lo que disfrutar y aprender». Edward Witten, físico y matemático, Instituto de Estudios Avanzados de Princeton.«Este libro hace una magnífica presentación de algunos conceptos centrales en la física moderna y las matemáticas explorados a través de juegos matemáticos. Esta es una de las aproximaciones a la física más singulares y cautivadoras con las que me he encontrado y permite a los lectores —ya sean principiantes o expertos— aprender disfrutando a través de acertijos y rompecabezas matemáticos.
La responsabilidad social de las empresas puede parecer un gasto innecesario hasta que se comprueba lo que cuesta ser irresponsable. En La sociedad que no quería ser anónima comprobaremos cómo, en la era de la información, la gestión responsable y la ética empresarial son asuntos que representan una gran apuesta estratégica.
A través de un personaje ficticio, Amaro Cifuentes, director de Responsabilidad Social de una compañía cualquiera, se desentrañan las claves de esta función empresarial gracias a una mezcla sutil entre la realidad y la ficción, el día a día y el esperpento, la gestión ordenada y la ocurrencia caótica. Y es que el desafío en la responsabilidad social para cualquier compañía moderna tiene un nombre: anticipación. Sus beneficios tardan en llegar, pero son claros, como podrá asegurar cualquier directivo que haya tenido que gestionar una crisis.