Olvídense del lugar común, no hay nada frío en la venganza, sólo brasas que reviven con el más leve soplo».
Buenos Aires, 1987: unos misteriosos asaltantes fuerzan la tumba del general Perón y roban sus manos. Se barajaron teorías esotéricas, políticas y económicas, pero el enigma nunca ha sido resuelto: ¿quiénes se las llevaron y por qué?
Madrid, 2024: una nueva ley de memoria histórica abre la puerta a encausar a algunos represores del franquismo y Juan Urbano recibe el encargo de dar con El electricista, uno de los torturadores más temidos del régimen, que chantajeó y despojó de sus bienes a algunos detenidos y a sus familias.
El profesor-detective nos llevará de la casa de Perón en España, donde se juntaban nazis con masones y se practicaban rituales de magia negra con la momia de Evita, al Torremolinos de los años setenta, mezcla de tugurios y estrellas de Hollywood, pasando por los paraísos fiscales donde escondieron su dinero muchos asesinos.
Una tarde, poco antes de la pandemia, un encuentro imprevisto trae de vuelta a la vida de Nina un espectro largamente anhelado: Bárbara, de quien no ha sabido nada en casi cuarenta años, la mira desde la bruma del pasado. Los recuerdos emergen; los juegos, el candor y los secretos de su infancia cobran vida nuevamente; pero, esta vez, la memoria que los ilumina está desprovista de toda inocencia. Para descubrir qué sucedió con Bárbara, Nina se embarcará en un viaje que la llevará, como en un descenso a los infiernos, hasta un pueblo enclavado en los Andes que fue especialmente castigado durante los años de la violencia política.
Desde que se quedó huérfano, el Lagartija malvive en el barrio de Triana junto con el Manco, poco mayor que él, y dos hermanos gemelos. Cada día se adentran en los callejones atestados de gente buscando monedas perdidas o algún mendrugo de pan, hasta que la fatalidad obliga a la cuadrilla de amigos a separarse.
A partir de ese momento, el Lagartija tendrá que enfrentarse en solitario a las inclemencias del destino y andarse con sumo cuidado, sobre todo cuando aparezca en su vida Hendrick van Belle, un mercader flamenco involucrado en turbios negocios que lo embaucará para que sea su aprendiz. Solo dejando atrás la inocencia y armándose de valor y astucia, este joven pícaro podrá sobrevivir en un mundo de violencia, corrupción y ambición desmedida.
Los textos inéditos suelen perdurar en cuadernos, márgenes o papeles dispersos; éste permaneció en una cinta magnetofónica, grabada en Nueva York hace más de cincuenta años. Los encuentros del seminario que Borges ofreció en la Universidad de Columbia en 1971 estuvieron dedicados a la escritura, tanto de ficción y poesía como de traducción. Cada reunión estuvo abierta a las preguntas de los estudiantes y, a la manera de los diálogos platónicos, la conversación recrea el contraste de los puntos de vista del autor y de sus lectores.
¿Cómo construye Borges un poema o un relato? ¿Qué diferencia reconoce entre cuento y novela? ¿Por qué nunca escribió una? ¿Cuál es el deber del escritor en función de su tiempo? ¿Qué distancia hay entre lo que un escritor se propone hacer y lo que en realidad hace?
En este libro Borges contesta, entre muchas otras, a estas preguntas.
En la capital de la colonia, Bella, una chica de su misma edad con unos conocimientos botánicos poco comunes, espera noticias sobre su padre, que regresa de la metrópoli.
Bella y Ökkó no lo saben, pero sus historias están a punto de cruzarse. De su mano viviremos el nacimiento de la colonia española, entre culturas enfrentadas y los avatares de los primeros exploradores de África, a través de una naturaleza desbordante y muchas veces letal.
En esta novela de trazos autobiográficos, Capote relata la historia de una pequeña comunidad norteamericana cuyos cimientos morales se ven conmocionados por un extraño episodio. Collin Fenwick, joven huérfano que vive con las solteronas Talbo, es testigo de la singular relación que une a las dos hermanas: Verena, rígida y avara, la mujer más rica del pueblo, y Dolly, que ha hipotecado su vida al cuidado de su hermana y la casa. Ambas padecen de soledad. Dolly sólo halla distracción en los ratos que pasa con Catherine, una negra que realiza las labores domésticas, y en ocuparse de su curiosa medicina para la hidropesía. La intervención de un pícaro que desvalija a Verena, frustrando de paso sus expectativas sentimentales, desencadena el acontecimiento central: Dolly y Catherine abandonan la casa y se instalan, junto al joven Collin, en la precaria cabaña construida en la cima de un enorme árbol. Este hecho insólito provoca el desconcierto en la buena sociedad del pueblo, entre cuyos preclaros miembros se cuentan un sheriff servil, los brutos de turno y, cómo no, el reverendo y su esposa. Pero los improvisados moradores del árbol también ganan adeptos, como los panaderos County, el joven Henderson y el peculiar juez Cool, que encuentra ocasión de redimir el vacío de su vida...
La conversación es un arte efímero y privado; quizá el más selecto de todos, ya que son muy pocos los elegidos que tienen la fortuna de escuchar y participar en cualquiera de sus mejores representaciones. Casi todos los que tuvieron el privilegio de conocer a Oscar Wilde coinciden en que era un conversador incomparable. Un aspecto esencial de su lúcida y amena conversación se preserva en los incontables e ingeniosos epigramas que brillan a lo largo de toda su obra; su secreto consiste en que, siendo al mismo tiempo ciertos y falsos, siempre amplían nuestra visión de la vida.
Cuando tenía doce años, Cosimo Piovasco, barón de Rondò, en un acto de rebelión contra la rígida disciplina familiar, se encaramó a una encina del jardín de la casa paterna. Ese mismo día, el 15 de junio de 1767, conoció a la hija de los marqueses de Ondarivia y le anunció su propósito de no bajar nunca de los árboles. Desde entonces y hasta el final de su vida, Cosimo permanece fiel a ese principio.
Desde las postrimerías del siglo XVIII y hasta los albores del XIX, el barón participa tanto en la Revolución francesa como en las invasiones napoleónicas, pero sin abandonar nunca esa distancia necesaria que le permite estar dentro y fuera de las cosas al mismo tiempo.
Al sentir próxima la muerte, el barón Béla Wenckheim, que ha pasado buena parte de su vida exiliado en Argentina, decide regresar a su Hungría natal con la esperanza de reencontrarse con su amor de adolescencia. Pero su retorno siembra la confusión en el pueblo, muchos de cuyos habitantes lo reciben como a un rico benefactor capaz de salvarlos de la fatalidad, cuando en realidad ha dilapidado su fortuna en los casinos de Buenos Aires. En la ola de rumores y malentendidos cada vez más extravagantes participarán hasta los políticos y periodistas de la región. Krasznahorkai hilvana con virtuosismo las múltiples voces de esta comunidad en una novela coral y apocalíptica que muchos han considerado su obra maestra. El ambicioso tour de force de uno de los autores más visionarios de la narrativa contemporánea europea.
Magnéticos e irresistibles. En cada uno de los cuentos de El buen mal, Samanta Schweblin nos abduce a otra dimensión donde quedamos en contacto íntimo con sus personajes. Encandilados por el fulgor de la inminente tragedia, vulnerables y profundamente humanos, advierten cuánto podría transformarlos la irrupción de lo inesperado. A algunos los dejará de pie frente al dolor, a otros dialogando con la culpa y a todos atravesados por la incertidumbre. ¿Importa saber qué es verdad? Se trata, de principio a fin, de ser partícipes de un fenomenal artificio literario. Con inédita perspicacia, Schweblin intuye el punto de quiebre de una voluntad, la intensidad premonitoria de un temblor y la lejanía que impone la ternura. Conoce la mejor de las infinitas posibilidades de una historia y el modo de encajar las piezas de una trama para dar con un gran relato que se hunda y proyecte, oscurezca e ilumine el día a día de la época y el alma de quienes la habitan. En su literatura, premiada internacionalmente, los filos entre realidad y ensueño deslumbran como los de un cuchillo.