INFANTIL

Las mascotas forman parte de la vida de muchas familias, a las que regalan compañía, alegría, musicalidad. Pero en ocasiones se les exigen sacrificios que a ellas no les corresponde hacer. Porque se les aparta de su hábitat natural, se les encierra y se les roba su libertad. En El ruiseñor que no quería cantar, en gran medida basado en un hecho real, Maritza Florentino nos trae un testimonio de hoy, que pone de relieve la importancia de tener una voz, de dialogar y de procurar un acuerdo para que vivamos en armonía con la naturaleza y todos seamos felices.

Si estás leyendo esto seguro que sabes quién es el Ruso. Sí, el grandullón con gorro de invierno y minigafas de sol azules que grita siempre «DAVAIII» antes de liarla. Pero... ¿sabes cómo se originó la verdadera leyenda del DAVAI? Esta es la historia del Ruso como jamás se había contado: -Su infancia en uno de los pueblos más fríos del mundo rodeado de hermanos igualitos que él. -La primera vez que soltó un «¡DAVAIII!» y lo que sucedió después. -Sus años en la escuela, donde por increíble que parezca, sufrió bullying por parte de sus compañeros. -Y su increíble viaje junto a un curioso personaje, el Cuñado, a Estados Unidos, donde conocerá a Taylor, el típico chico americano. Pero no te creas que vas a estar ahí leyendo sin más, ¡qué va! Este es un libro interactivo, y te tocará a ti ayudar al Ruso y a todos los personajes a completar la mayor leyenda jamás contada.

La familia Peppel está horrorizada: íTía Ulrike viene de visita! Como si eso no fuera ya bastante; Uff tiene que abandonar el cuarto de Lio y trasladarse al desván. La criatura azul está que trina y decide mandar a la desagradable Ulrike de vuelta a casa cuanto antesà, pero entonces los dos amigos se enteran de que la tía anda en secreto detrás de un mapa del tesoro.

Hace 66 millones de años el salvaje Uff se echó una siestecillaà y acaba de despertarse. Ahora, gracias a sus ideas descabelladas, íla vida de la familia Peppel anda patas arriba! A Uff últimamente la casa de los Peppel se le cae encima. Lio está muy ocupado con los deberes del colegio y no tiene tiempo para él. Así que la criatura prehistórica empieza a emitir mensajes en charlés con la esperanza de encontrar un nuevo amigo.

¡Por fin han llegado las vacaciones de verano! La familia Peppel se pone en camino hacia la hermosa Italia. Lo malo es que Matthias tiene que ir a paso de tortuga por la autopista para que Uff no se maree. Cuando Lio y su familia llegan por fin al hotel, tratan por todos los medios de que la criatura prehistórica permanezca oculta a los ojos de los clientes.