Estos cuentos presentan las habilidades de los gatos y su relación con los humanos. Tocan el piano como Mozart, pintan como Pollock y viven como perros y gatos. Interrumpen los juegos de mesa y atraviesan el teclado de una computadora. Finalmente son la musa de un pintor y testigos de una amistad.
El río Ozama no es el mismo que Don Iván conoció en sus años mozos. Mediante un poema escrito por el abuelo en aquellos años los niños sueñan con aquel río. Durante toda la narración el abuelo y los nietos tratarán de encontrar soluciones para salvar al río que está en vías de desaparecer por la contaminación.