En esta selva hay un club de niños empeñados en cuidar tu salud, así que abre bien los ojos y aprende: Amelia Trotamundos y sus cacatúas te proponen empezar con un buen desayuno y justo después, Alexander Risitas te va a presentar a un cocodrilo con el que aprender a cepillarte los dientes. Y así un montón de historias y consejos saludables.
¡Tiburón-tástico! Stink va a dormir con los peces después de que sus padres ganaran una fiesta de pijamas en el acuario!
La noche en que Stink y sus amigos se quedan a dormir en el acuario es el sueño de todo fanático de la ciencia hecho realidad. A Stink le encanta el juego de la búsqueda del tesoro de criaturas marinas, el espectáculo de luces de medusas y los tiburones tigre de arena con dientes afilados. Pero después de algunas historias escalofriantes alrededor de la fogata virtual, ¿podrá conciliar el sueño Stink pensando en Bloody Mary, el Frankenpulpo mutante que se supone que está en busca de víctimas?
El dragón es uno de los seres más extraordinarios que han poblado los mitos y leyendas de todo el mundo. En casi todos los relatos de la creación, camuflados
con nombres autóctonos, hay, por lo menos, un dragón.
Pero, ¿son todos iguales? ¿Es verdad que hay dragones sin alas? ¿Todos escupen fuego? ¿Cuántas extremidades tienen? ¿Pueden tener más de una cabeza? ¿Los dragones son solo amos del fuego o están relacionados también con los otros elementos: agua, tierra, aire?
Una historia ilustrada de modo muy original y creativo, para charlar sobre cómo tolerancia no significa necesariamente amistad
Eva era como todo el mundo, salvo por esa cola de dinosaurio con la que nació. Sus padres dudaban de si debería ir a la escuela. La pequeña, deseosa de aprender y tener amigos, impuso su voluntad: iría a clases. Todo marchaba a la perfección: le gustaban las lecciones y los compañeros le caían bien. Hasta que llegó Memo, quien se burlaba de ella sin el menor empacho. Este niño cruel sólo estaba enojado: mientras Eva era feliz con su cola de dinosaurio, él odiaba su enorme cresta de saurio.
Mate es un niño que, como tantos, siente una enorme fascinación por los dinosaurios. Sin embargo, a diferencia de tantos otros, no crecerá. Su cuerpo mantendrá su estatura por debajo del promedio toda la vida. Un día, en un centro comercial en construcción, cerca de su casa, encuentran huellas de un alosaurio, es decir, lagarto extraño, nada menos. Niño y animal se comunicarán, ¿en sueños?, y quedarán contentos, sabiendo que, a su manera, los dos son excepcionales.
Los dinosaurios no se extinguieron. Viven en cada niño que se siente velocirráptor o cada niña que se cree triceratops, es decir, en cada niñosaurio. Pero estas criaturas magníficas no lo tienen todo fácil. Deberán enfrentarse (cada una a su manera, cada una con su historia) a un mundo en el que no siempre es bienvenida la diversidad: de cuerpos, de mentes ¡y hasta de alimentos!