Adriana, Jimena y Martina se han desprendido de todas las piedras en los bolsillos y pueden volar! Pero la banda de NOLOCONSEGUIRÁS sigue al acecho y prepara un nuevo golpe para evitar que las niñas se eleven libres y felices. Quizás con la ayuda del señor SIQUIERESPUEDES, ellas consigan cambiar la canción del NO por la canción del SÍ: ¿lograrán volar hasta lo más alto? ¿Lograrán ser lo que quieran ser?
A veces pienso que tal vez en la vida tengamos una especie de cuenta que nos permite hacer determinadas cosas, pero solo podemos hacer unas cuantas, y si nos pasamos, ¿se acabó? En el segundo verano de Maulina en las casas de plástico ha...
Por suerte, faltan solo siete años y medio para que sea adulta y pueda decidir por mí misma, por fin. Hasta entonces Paulina Schmitt tiene todavía mucho que organizar: por ejemplo, debe tramar un plan que les permita a ella y a su madre regresar a su querido reino de Mauldavia, su antigua casa. Paulina, a la que todos llaman «Maulina» no sin motivo, no se somete tan fácilmente. Alguien como ella no deja que la echen así como así y la trasplanten a un aburrido extremo de la ciudad, donde se supone que tiene que ser feliz con su madre en una casa de plástico.