Amelia Peabody no es lo que se dice una dama victoriana al uso. Decidida y aventurera, al morir su padre y heredar una gran fortuna, decide embarcarse en un viaje por Europa, cuya primera escala es Roma. Allí rescata a Evelyn Barton-Forbes, la nieta de un conde caída en desgracia, y se la lleva consigo a Egipto. Juntas explorarán el país de los faraones y se incorporarán fascinadas a la misión arqueológica liderada por los hermanos Emerson. Encuentros inesperados, accidentes casi fatales y una momia que vuelve a la vida para sembrar el terror convierten una tranquila excavación en una trampa de la que solo la sagacidad y el arrojo de Amelia podrán salvarlos.
Tras la muerte de su padre, el prestigioso empresario alemán Eric Zimmerman decide viajar a España para supervisar las delegaciones de la empresa Müller. En la oficina central de Madrid conoce a Judith, una joven ingeniosa y simpática de la que se encapricha de inmediato. Judith sucumbe a la atracción que el alemán ejerce sobre ella y acepta formar parte de sus juegos sexuales, repletos de fantasías y erotismo. Junto a él aprenderá que todos llevamos dentro un voyeur, y que las personas se dividen en sumisas y dominantes... Pero el tiempo pasa, la relación se intensifica y Eric empieza a temer que se descubra su secreto, algo que podría marcar el principio o el fin de la relación.
Haley afronta su primer año de universidad, lejos de casa y todo lo que conoce, con una duda que está dispuesta a resolver: si realmente el amor es algo más que lo vivido hasta el momento. Pronto creerá estar cerca de encontrar la respuesta cuando su camino se cruce con el de un misterioso chico de ojos grises cuya mera presencia grita «problemas».
¿Merece la pena dejarse arrastrar por una atracción irresistible a pesar de que todos a su alrededor digan que es una mala idea? ¿Se puede luchar contra los demonios que persiguen al chico malo del campus o debería alejarse?
Al final, lo más difícil es determinar a qué corresponde de verdad la palabra «amor».
Cansado de vivir en un mundo en el que no encuentra su lugar, el millonario Andrew Blake decide dar un giro radical a su vida: deja su Londres natal y se marcha al campo en Francia… ¡A trabajar como mayordomo! Pero cuando llega a Beauvillier, nada sale como tenía previsto. Las relaciones entre los particulares habitantes de la mansión están llenas de malentendidos y situaciones absurdas, así que Andrew no tiene otra opción que intentar poner orden en esta caótica casa y hacerse amigo de Méphisto.
Una novela llena de charme, personajes inolvidables y humor, mucho humor.
Una puerta de entrada al mundo sugestivo que Vargas Llosa ha sabido crear y que lo ha colocado en la cima más alta de la literatura de nuestro tiempo.
Los cuentos recogidos en esta edición, publicados por primera vez en 1959, sirvieron como antecedente para la construcción de las obras maestras de Vargas Llosa. Muchos de los elementos técnicos y narrativos que caracterizan la prosa del gran escritor peruano aparecen en estas primeras piezas breves: «Los jefes», «El desafío», «El hermano menor», «Día domingo», «Un visitante» y «El abuelo». Los relatos, ambientados en las calles de distintas localidades de Perú, nos muestran un auténtico retablo de la realidad peruana cuyos protagonistas son adolescentes, en algún caso integrantes de pandillas donde se rinde culto a la competencia y al coraje.
Jean-Marie Gustave Le Clézio es uno de los novelistas franceses más celebrados y leídos en su país desde que, en 1963, ganara el renombrado Premio Renaudot con su primera novela, Le procès-verbal. Lo curioso es que, tras haber escrito más de treinta libros y haber sido traducido en el mundo entero, en nuestra lengua aún siga siendo prácticamente desconocido. Con la publicación de La cuarentena queremos remediar este incomprensible «descuido» y situar por fin a Le Clézio, también entre nosotros, en el lugar que merece.
Corre el año 1872 cuando en una taberna parisiense irrumpe desafiante el poeta Arthur Rimbaud y amenaza a la clientela. Diecinueve años después, Jacques Archambau, un joven médico que de niño asistió atónito a la tormentosa escena y que ignora cuán ligado se halla su destino al del célebre poeta, embarca en el Ava con su esposa Suzanne y su hermano Léon rumbo a la isla Mauricio, su tierra natal. Allí les espera el gran clan familiar que antaño expulsara al padre de Jacques y Léon. Sin embargo, tras declararse dos casos de cólera en el barco, los pasajeros -un puñado de europeos y multitud de indios contratados para la recolección de la caña de azúcar- se ven obligados a desembarcar en la isla Plate, frente a Mauricio, para pasar la cuarentena. Abandonados a su suerte, verán convertirse la paradisiaca isla en un infierno del que no saben si saldrán con vida. Frente a un Jacques perplejo y una Suzanne tal vez ya contagiada, Léon volverá los ojos hacia la isla, hacia la joven y bella india Suryavati. Hacia la vida.
Sara estudia Bellas Artes, pero cada vez le parecen menos bellas. Fran estudia Derecho, como quiere su familia, pero ni su corazón ni su vida giran en torno a ello. Bárbara actualiza sus redes sociales de manera constante y a ratitos estudia Diseño.
Los tres amigos se conocieron años atrás en una fiesta de disfraces y se creó entre ellos una bonita amistad en la que, sin saberlo, se fueron ocultando cosas.
Pero la vida, los momentos y las sensaciones les hacen ver que algo falla, y comienzan a plantearse si…
¿Será todo tan idílico como se quieren hacer creer?
¿Conseguirán sincerarse?
Y, sobre todo, ¿qué pueden perder si se cuentan la verdad?
Fue en un apartamento lúgubre de Vanves, durante su exilio francés, donde Tsvietáie-va escribió el presente texto, que relata el encuentro de la pequeña Marina con el dia-blo en la habitación de su hermana, don¬ de se refugiaba para leer libros prohibidos. Con una prosa burlona, ora exaltada, ora gélida, pero siempre hechizante, la poeta relata el despertar de su fascinación por las palabras, encarnadas en la figura del dia-blo, que su implacable mirada transforma en una criatura tan temible como seduc-tora. Una extraordinaria evocación lírica de la infancia y de la gestación de un genio literario irrepetible.
Imagina: eres un tiburón de las finanzas estilo lobo de Wall Street, perteneces a una buena familia y siempre lo has tenido todo; por no hablar de que no hay chica que se te resista. Y cuando estás a punto de rozar la cumbre del éxito con las yemas de los dedos, lo pierdes todo... por tu culpa. Tu única salida es volver a empezar y ahí estás, con tu traje esnob, en un polígono industrial en tu primer día como ceniciento. Pero, tranquilo, Alejo, que este no es el cuento de siempre, ¿o tal vez sí?