En este breve pero inmenso libro es el hijo, el sociólogo y profesor José Henrique Bortoluci, quien nos regala ahora las palabras de su padre, camionero de profesión durante cincuenta años, para relatarnos una vida llena de maravillosas anécdotas en la carretera. La distancia entre el hijo académico, el primero de la familia que pudo estudiar, y el padre jubilado, ahora consumido por el cáncer, parece insalvable, pero Bortoluci consigue acercarse a su mundo y resolver el enigma de un padre ausente que recorrió todo Brasil y participó en enormes proyectos de infraestructuras, como la Carretera Transamazónica: un plan que conllevó la brutal deforestación del Amazonas y que, como tantos otros planes encabezados por la junta militar, carcomió un país que en su día fue salvaje y que a día de hoy arrastra una profunda herida.
Siguiendo los pasos de autores como Annie Ernaux y Svetlana Aleksiévich#, en este conmovedor y brillante testimonio de amor filial Bortoluci revisa la historia reciente de Brasil para mostrarnos las cicatrices inscritas en la piel tanto de las personas como de los países.
Una maestra llega a la escuelita y varias vidas cambian. La de esa decena de chicos siempre con ganas de galletitas y gaseosa, que van del garabato a la letra, de los botones de colores a las cuentas matemáticas, de los piedrazos a la poesía. La de Dylan, que un día se asoma desafiante desde el techo. Y la de ella misma, que apenas recibida ha migrado desde un pueblo del interior y completa su salario como moza. De lejos, la Ciudad parece un castillo. De cerca, es una fortaleza inexpugnable. En ese ida y vuelta, clase a clase la Seño va transformándose. Los chicos crecen, las adolescentes se convierten en madres y Dylan, que rescató a un cachorro de morir ahogado y dio de comer en el pico a un pichoncito, busca sosiego a su profundo dolor de niño que ha caído de su propio nido.
Con humor, ternura y una prosa delicadísima, Marie Gouiric nos conmueve desde la primera a la última página y hace que nos preguntemos quién aprende y quién enseña una vez que alguien se entrega de corazón a los demás.
Un caso abierto en un pueblo lleno de secretos en el que desenterrar el pasado puede ser mucho más peligroso de lo que parece.
Hace treinta años la hermana gemela de la agente del FBI Atlee Pine fue secuestrada. Tenía solo siete años y, aunque todo el mundo da por hecho que fue asesinada, para Atlee es un caso que no dará por cerrado hasta descubrir qué ocurrió. Unas vacaciones forzosas la llevan de vuelta a su antiguo hogar y Atlee reúne algunas pistas con los recuerdos de personas que conocieron a la familia. Sus padres, abrumados por la culpa, se separaron tras la tragedia; el padre acabó suicidándose, y poco después la madre la abandonó. La aparición del cadáver de una mujer en plena calle cubierta con un velo de novia la obliga a dejar a un lado su investigación y a concentrarse en atrapar al asesino antes de que vuelva a actuar.
Estados Unidos se desangra en una guerra fratricida. Stella, una ingeniosa esclava de Nueva Orleans, borda mapas cifrados en trozos de ropa para ayudar a sus compañeros a huir. Por temor a las represalias, Stella mantiene oculta su relación con William, un esclavo que ha logrado huir para sumarse a la lucha. Mientras tanto, en Nueva York, Lily, esposa de un soldado del ejército de la Unión destacado en Luisiana, confecciona vendajes para el frente. Cuando deja de recibir noticias de su marido, decide hacer un peligroso viaje al sur para buscarlo. Ahí es donde los caminos de Stella y Lily se cruzarán para descubrir cómo la amistad tiene el poder de salvarnos.
El espacio que ocupa una mujer en el corazón de su esposo, es el mismo que ocupa en su cama». Tal es la tradición en los aislados campamentos seminómadas de lo más profundo del desierto mauritano. Cuanto más pese y más gorda esté la mujer, más beneficio significará para la familia, por mejor dote la podrán casar. El leblouh, llaman a tal práctica ancestral de siglos que aún hoy sigue… Y, por eso, más y más las ceban con pienso de ganado… Por eso, cuando Laila cumple quince años, y tras descubrir que existen otros mundos y otras mujeres más delgadas y con mejor vida, decide escapar. Inicia entonces un viaje inaudito para una joven de su pueblo y, gracias a la ayuda de Menelik, comienza una lucha por sus sueños y su libertad. La suya y la de las mujeres como ella. Y en esa fascinante huida hacia adelante descubrirá paisajes fascinantes, personajes increíbles y el mayor problema al que se ha enfrentado, se enfrenta y se seguirá enfrentando la humanidad: la falta de agua. Alberto Vázquez Figueroa es uno de los autores más vendidos del siglo XX en lengua española, reconocido por crítica y lectores por sus grandes novelas de aventuras. Esta vez nos trae una historia que aúna dos grandes temas de máxima actualidad: la sequía y el feminismo Leblouh: tradición de algunos pueblos de África de engordar a las mujeres hasta reventar para así ganar más dinero con ellas.
Una novela que mezcla la ciencia ficción con el humor.
James Bolívar era el ladrón, granuja y pillo más grande de toda la Galaxia. Hasta que un día fue arrestado por la policía interestelar, la cual, finalmente lo obligó a ingresar en sus filas para llevar a cabo una singular empresa, a fin de limpiar la Galaxia de tipos como él.
Pero al final, y cuando dejó de ser policía, se dedicó a una cacería: la de la mujer a la que adoraba. Angelina había construido una nave espacial bélica y junto con James iban a conquistar el mundo... ¡La Galaxia en peso se estremeció ante aquella idea!