Dos vidas: la de Flora Tristán, que pone todos sus esfuerzos en la lucha por los derechos de la mujer y de los obreros, y la de Paul Gauguin, el hombre que descubre su pasión por la pintura y abandona su existencia burguesa para viajar a Tahití en busca de un mundo sin contaminar por las convenciones. Dos concepciones del sexo: la de Flora, que sólo ve en él un instrumento de dominio masculino, y la de Gaugin, que lo considera una fuerza vital imprescindible puesta al servicio de su creatividad. Vargas Llosa revela en esta novela el nexo de unión entre dos personajes opuestos: alcanzar un paraíso donde sea posible la felicidad.
La disputa de Jean-Paul Sartre (1905-1980) a lo largo de toda su obra filosófica con el carácter reduccionista y simplificador de los enfoques científicos en el estudio del hombre comenzó con este temprano "Bosquejo de una teoría de las emociones", dedicado a mostrar las insuficiencias y contradicciones de las teorías psicoanalíticas y a criticar las escuelas psicológicas que se limitan al estudio de los hechos suministrados por la percepción espacio-temporal y por la experiencia introspectiva. Según concluye Sartre en esta obra, la psicología debe partir del carácter significativo de lo psíquico como aspecto diferenciado de la totalidad humana y buscar su fundamento en una antropología fenomenológica.
Las Cartas del diablo a su sobrino se publicaron por primera vez en el Manchester Guardian en 1941. Recogen la correspondencia entre demonios: uno ya anciano y retirado y otro joven en su primera misión con un "paciente". "Las Cartas -dice el propio Lewis- tuvieron una acogida como nunca hubiera soñado. Las críticas fueron elogiosas o estaban llenas de esa clase de irritación que le dice al autor que ha dado en el blanco que se proponía; las ventas fueron inicialmente prodigiosas, y se han mantenido estables. El libro ha tenido un número suficiente de lectores como para que valga la pena dar respuesta a algunos de los interrogantes que ha suscitado entre ellos. La pregunta más corriente es si realmente creo en el diablo".
A partir de un aparente robo de la cabeza de cera de la Princesa de Lamballe del Museo Grévin, Victor B., fotógrafo del museo, ve una serie de hechos sin sentido desencadenarse en torno a este personaje, asesinado durante la Revolución francesa. París cae sumida ante la incertidumbre y la obsesión, todo esto se refleja en el rodaje de una película sobre esta princesa. Poco a poco el comportamiento de los involucrados se irá tornando más extravagante y enfermo, lo cual resultará en crimen obsesivo y enfermo, en el que la historia de las masacres se repetirá con un sentido distorsionado.
Tras perder la guerra contra Titán, la Tierra ha quedado cubierta de radiación y la mayor parte de la población superviviente es estéril. Las babosas alienígenas que gobiernan el planeta obligan a los humanos a participar en un juego complejo e interminable en el que se apuestan dos activos muy importantes: tierras y esposas. Pete Garden acaba de perder a Freya y el territorio de Berkeley, en California, pero tiene un plan para recuperarlo todo. Si no se lo impiden los aliens, los traidores psíquicos o su nueva mujer.
Los jugadores de Titán es tanto una sátira como una aventura, un libro en el que se examinan los vínculos que unen a las personas y los exasperantes pecados veniales de los burócratas, ya sean éstos humanos o babosas alienígenas.
En el planeta Eltanin, una colonia de terráqueos de la Liga Planetaria está al borde de la extinción debido a las duras condiciones de vida del planeta y a una amenaza inesperada. No tienen otros vecinos que los nómadas primitivos, que, aunque temen a los terrestres, se instalan en las cercanías de la colonia durante los crueles inviernos que duran quince años.
En el invierno que se avecina, un riesto hasta ahora desconocido se cierne sobre todos ellos. Las hordas bárbaras del norte, los criminales espectros de la nieve, se acercan a la colonia, y si los terrestres no se unen a los nómadas, superando seis siglos de desconfianzas, éste puede ser el último invierno para todos ellos.