Poco antes de morir, el escritor y fabricante de tejidos Joseph Langhorne encuentra la forma de distraer a su hijo enfermo: leerle historias que se representan tras la ventana de su dormitorio, la única con vistas a cualquier parte del mundo. Sin embargo, uno de esos cuentos parece esconder una advertencia, el anuncio de que algún día llegará alguien que lo cambiará todo.
Veinticinco años más tarde, William Langhorne cree que por fin se ha cumplido el presagio de su padre cuando conoce al sastre Barros Scaramuzzelli. Con su aparición, el pueblo de Tonleystone se expone a la apertura de una sastrería y a la irrupción de la alta costura, un reclamo repentino en una sociedad rural cuyas vidas se verán de pronto amenazadas.
Los poetas feroces cuentan lobos para dormir es un homenaje a la poesía y, muy especialmente, a los poetas que mantuvieron desigual debate entre poesía y vida. Con soltura y atrevimiento, huyendo de tópicos habituales, desde ángulos novedosos sabe reflexionar y dar la vuelta a la realidad preconcebida. Su humor y aparente despreocupación están, sin embargo, teñidos de amargura, pues sus poemas no dejan de ser sino una tentativa de lo infinito inalcanzable; la constatación de que, a la postre, la vida es mucho más que la poesía.
Un legendario café
Una familia valiente
Un amor prohibido
Wiesbaden, 1945. La joven Hilde apenas puede creer su suerte: la guerra ha terminado y el Café del Ángel se ha salvado milagrosamente. Hilde sueña con volver a convertir el negocio familiar en el glamouroso lugar que reunía a artistas y personalidades de la ciudad. Pero los primeros conflictos no tardan en surgir cuando una bella joven entra en el café y se presenta como su prima Luisa. ¿Quién es esa enigmática mujer que ha luchado por llegar hasta allí desde Prusia Oriental? Entre las dos jóvenes crece una rivalidad que amenaza con envenenar el ambiente del café. Hasta que ambas se dan cuenta de que tienen algo en común: un secreto de la guerra que les ha perseguido hasta el día de hoy...
Todo el mundo en Athena, Misisipi, conoce a Charlie Harris, el amable bibliotecario dueño de un gato llamado Diesel al que pasea con correa. Ha regresado a su ciudad natal para sumergirse en los libros, pero pronto la vida real lo envuelve en una novela de misterio…
Godfrey Priest, famoso, arrogante y manipulador autor de bestsellers gore y antiguo compañero de clase de Charlie, aparece muerto.
A pesar de los resentimientos Charlie, con la ayuda de Diesel, deciden resolver el misterio de la muerte del desagradable novelista a quien no le faltan enemigos.
Nacer es la primera migración, el exilio compartido por la humanidad entera. A ciertas personas la vida o la violencia las empuja a seguir alejándose del lugar natal. Itinerantes, arrancadas, crisálidas del pasado perdido. A ellas dedica este libro William González Guevara, joven poeta transterrado que grafiteó versos de Rubén Darío en las paredes de un barrio de Madrid. La vida de los Inmigrantes de segunda transcurre en páramos contemporáneos, en neones de sueños apagados y vastas podredumbres. Allí donde brotan casas de apuestas para crear ludópatas y fusilar sueños. Donde el autorretrato del artista adolescente incluye una nueva vacía, tu chándal favorito, tu acento repudiado. Donde pese al racismo, todo el mundo el mundo refiere pagarte en negro. William acoge en sus versos lo que no cabe en los pactos de silencio.
Eran cómplices de aventuras. Como Los Cinco, esas novelas juveniles de unos amigos inseparables. Lo fueron hasta que un segundo lo cambió todo. Los veranos de la infancia, la vida sin prisas y aquella amistad que parecía eterna estalló en un coche una madrugada de invierno. El peso de la culpa dinamitó sus sueños y dejaron de verse. Pero la delirante promesa de celebrar juntos el cuarenta cumpleaños de un muerto volverá a reencontrarlos veintiún años después. Ha pasado demasiado tiempo. Se han convertido en desconocidos, pero todos deciden cumplir y pasar cuatro días juntos para redescubrirse y comprobar que más allá de la muerte, más allá del dolor, está la vida y esa amistad que les pertenece y ha dado valor a su supervivencia.