Nora Krug adapta gráficamente el libro de Timothy Snyder Sobre la tiranía (Galaxia Gutenberg, 2017), con las veinte lecciones claves que el historiador ofrece para actuar con consciencia individual y colectiva ante las amenazas geopolíticas. Un manual fundamental para entender el declive moral de los Estados Unidos y el peligro del auge de la extremaderecha. El libro de Snyder, que se mantiene desde su publicación en la lista de más vendidos de The New York Times y ha cosechado numerosos premios y halagos de la crítica, cobra ahora nueva vida gracias a la extraordinaria mano de Krug. Sirviéndose de algunos de los momentos más oscuros de la historia del siglo xx, desde el nazismo hasta el comunismo, Sobre la tiranía nos conduce por los senderos más turbios del último siglo con el objetivo de radiografiar el origen y la estructura de los regímenes dictatoriales del pasado para así arrojar luz sobre el autoritarismo del presente.
En una época de gran incertidumbre e inestabilidad, esta edición gráfica de Sobre la tiranía enfatiza de forma aún más clara la importancia de ser participantes activos, conscientes y deliberados en la resistencia contra el fascismo de nuestros tiempos.
Sabrina Gallo, una mujer de 27 años, desaparece un día al regresar del trabajo. A partir de ese momento comienza la historia de quienes se quedan: su hermana, su novio y un viejo amigo de éste. Cuando la filtración de un vídeo sobre Sabrina se hace viral, este trágico suceso se convierte en una gran conversación a nivel nacional que dará pie a teorías de la conspiración, noticias falsas y especulaciones sobre el dolor y la pérdida.
Nick Drnaso firma una novela gráfica sobre una sociedad hiperconectada en donde los medios de comunicación y las redes sociales, lejos de acercarnos, nos convierten en actores y marionetas.
Una conmovedora novela gráfica en la que se abordan temas como el paso de la infancia a la edad adulta, el acoso escolar, los problemas derivados de la baja autoestima y la capacidad del arte en general y la literatura en particular para convertirse en tablas de salvación.
Montreal, finales de los años ochenta del siglo pasado. Hélène es una muchacha de doce años que inexplicablemente ha sido dejada de lado por sus antiguas amigas, que ahora se divierten humillándola en público. El día a día de la protagonista es un infierno y su autoestima se resiente hasta el punto de que llega a asumir como ciertos los insultos recibidos.
No quiere recurrir a la ayuda y comprensión de su madre, porque la vida de esta no es mucho mejor: siempre al borde del colapso por agotamiento, mantiene ella sola a Hélène y sus dos hermanos. El único consuelo de Hélène es la lectura de Jane Eyre, la novela de Charlotte Brontë, con cuya desgraciada protagonista se siente identificada.
En todas las tradiciones budistas, «tomar refugio» es el primer paso en el camino a la liberación interior. Se trata de un acto de palabra donde se testimonia la confianza en el buda, en el dharma y en el sangha, los tres tesoros. A partir de esta idea, Zeina Abirached y Mathias Énard tejen una entrañable historia sobre la soledad, el amor y la búsqueda de la propia identidad.
Tomar refugio se desarrolla en dos líneas temporales y geográficas: en el Afganistán de 1939, la escritora Annemarie Schwarzenbachvive un idilio con una paleontóloga mientras en Europa estalla la Segunda Guerra Mundial; en el Berlín de 2016, un joven alemán colabora en la creación de un campo de refugiados y se enamora de una mujer siria casada, amor que es correspondido, aunque las diferencias culturales parecen separarlos.
Dos historias de amor atípicas que resuenan entre sí a pesar de la distancia: tiemposatribulados, seres humanos que al tratar de vencer aquello que los diferencia se enfrentan a la oposición de la sociedad.
Sombras en la hierba prolonga y completa los recuerdos que Isak Dinesen recogió de su increíble vida en Kenia, cuya parte principal quedó plasmada en uno de los libros de memorias más bellos jamás escritos: Memorias de África. Son muchos los personajes y muchas las anécdotas que recorren como corrientes subterráneas las páginas de Sombras en la hierba: el comercio en Nairobi, la caza de leones homicidas, el mundo de los sueños, las danzas rituales en la granja y una multitud de pequeños acontecimientos extraordinarios vividos entre gentes más extraordinarias aún. Pero, a pesar de todo, no se puede hablar de autobiografía: de una u otra forma, la autora permanece al margen de la narración y cede el papel protagonista a quien nunca ha dejado de tenerlo: la vida, siempre diversa, indomable, cruel y tierna.
La fama de la desapacible Kimberly Clark Weymouth, una pequeña ciudad eternamente aquejada por heladas ventiscas y mucha nieve, y donde Louise Feldman ambientó el clásico infantil La señora Potter no es exactamente Santa Claus, permitió a Randal Peltzer abrir una exitosa tienda de souvenirs. Cada día, la ciudad recibe a lectores de la excéntrica escritora y, a regañadientes, vive de ella. Pero ¿qué pasaría si, harto de un destino que no ha elegido, Billy, hijo de Randal, decidiese cerrar la tienda para mudarse a otra ciudad? ¿Podría Kimberly Clark Weymouth permitirse dejar de ser el lugar que ha sido siempre y convertirse en otra cosa? Bajo la exuberante prosa y la imaginación sin límites de Laura Fernández, se esconde una sólida historia sobre la maternidad, la creación y la renuncia, el arte como refugio y la soledad del incomprendido, en este cruce entre una novela de Roald Dahl para adultos y unalocado y digresivo T.C. Boyle que hubiera leído más de la cuenta a Joy Williams. La señora Potter no es exactamente Santa Claus pretende hacer saltar por los aires la sola idea de la existencia del relato, o del relato único de aquello que somos, porque si algo somos es una infinidad de posibilidades.