En 1944, Mathilde, una joven alsaciana, se enamora de Amín Belhach, combatiente marroquí en el ejército francés durante la II Guerra Mundial. Tras la Liberación, el matrimonio viaja a Marruecos y se establece en Meknés, ciudad en la zona del Protectorado de Francia con una importante presencia de militares y colonos. Mientras él intenta acondicionar la finca heredada de su padre, unas tierras ingratas y pedregosas, ella se sentirá muy pronto agobiada por el ambiente rigorista de Marruecos. Sola y aislada en el campo, con su marido y sus dos hijos, padece la desconfianza que inspira como extranjera y la falta de recursos económicos. ¿Dará sus frutos el trabajo abnegado de este matrimonio?
Octubre, 1961. Un avión repleto de mujeres despega de Madrid con destino a Australia. Ciento catorce almas, equipadas con sus sueños y temores, se dirigen al fin del mundo.
UN VIAJE AL PAÍS DEL ATARDECER DORADO
UN AMOR IMPOSIBLE DE OLVIDAR
UN SECRETO A PUNTO DE ESTALLAR
Entre los verdes campos de caña de azúcar de Queensland y el dorado del cielo australiano, se alza la plantación Santa Ana. Elisa, una joven asturiana integrante de una iniciativa del franquismo y la iglesia católica para poblar Australia llamada Operación Marta, consigue trabajo en la hacienda aunque ella tiene otro objetivo: encontrar al padre de su hijo, desaparecido tiempo atrás.
Sin embargo, cuanto más investiga, más misterios descubre alrededor de la plantación, de sus patronos y de los duros trabajos de los jornaleros. Bajo la amenazante mirada del sacerdote y el guardián de Santa Ana, Elisa buscará la verdad y hallará la sabia y valiente compañía de los aborígenes del lugar y de aquellos que, como ella, han perdido demasiado para temerle a nada.
Celia Santos escribe sobre la Operación Marta o "el avión de las novias", un viaje histórico en el que cientos de mujeres fueron enviadas a Australia con la esperanza de un futuro mejor. El país del atardecer dorado nos desvela el oscuro enigma oculto tras esa promesa en una historia repleta de amor, esfuerzo y esperanza de la mano de unos personajes inolvidables.
Una de las novelas más emblemáticas de Paul Auster
Marco Stanley Fogg es un huérfano que ha crecido bajo el cobijo de su tío Victor, un clarinetista de poca fortuna. Cuando éste muere, consigue vivir durante un periodo de la venta de los libros que le ha dejado en herencia. En el tiempo en que el hombre camina por primera vez sobre la luna, M. S. Fogg inicia un viaje de búsqueda de su identidad y sus orígenes que lo llevaráde Manhattan al remoto Oeste americano.
La novela nos narra la vida de Panchaali, desde su nacimiento mágico del fuego como hija de un rey hasta su actuación enérgica como esposa de sus cinco maridos, que han sido expulsados del reino de su padre. Panchaali se empeña en reclamar los legítimos derechos de sus esposos, manteniéndose al lado de estos a lo largo de años de exilio y de una terrible guerra civil. Mientras tanto, asistimos a sus enfrentamientos con su suegra para hacerse con el control de su hogar, su complicada amistad con el enigmático Krishna y su atracción secreta por un hombre misterioso que resulta ser el enemigo más peligroso de su marido.
Antes de que nadie se despierte, en una perfecta mañana de agosto, Elle se dirige a nadar en el espléndido estanque del Palacio de Papel, la casa en los bosques de Cape Cod donde su familia ha pasado los veranos durante generaciones. Desde el porche, Elle aún puede ver la mesa sin recoger de la cena; copas de vino vacías, cera de velas en el mantel, ecos de las risas de sus familiares y conocidos. Pero esta mañana es diferente: la noche anterior Elle y su mejor amigo de la infancia, Jonas, se escabulleron para tener un apasionado encuentro contra la pared exterior de la casa mientras sus parejas charlaban en el interior.
Décadas de recuerdos, secretos y mentiras han conducido a Elle hasta este día. Ahora, durante las siguientes veinticuatro horas, tendrá que elegir entre la vida que ha construido con su maravilloso marido, Peter, y la que imaginó con su primer amor, Jonas, si un trágico suceso no lo hubiera cambiado todo para siempre.