Fuera de la isla no hay nada: una niebla que mata todo lo que toca destruyó por completo el mundo. En la isla, sin embargo, ciento veintidós aldeanos y los tres científicos que los gobiernan viven en un paraíso idílico gracias al sistema de seguridad que los protege de la niebla.
En la isla, los días son plácidos y los isleños viven felices pescando y cultivando la tierra hasta que, para horror de todos, descubren que uno de sus tres amados científicos ha sido brutalmente asesinado. Y eso no es todo: el asesinato ha desencadenado una cuenta atrás que hará que, si el crimen no se resuelve en las próximas 107 horas, el sistema que los protege se desactive y la niebla inunde la isla y acabe con todos los que están en ella.
Mónica, hija del prestigioso doctor Andrade, vive en una casa pintada de azul, junto a una playa de olas mansas, donde las mariscadoras rastrillan la arena. En el muelle espera el barco que cruza la ría de Vigo cada media hora.
Una mañana de otoño, el inspector Caldas recibe la alarmada visita de su padre: Mónica no se presentó el fin de semana a una comida familiar ni acudió el lunes a impartir su clase de cerámica en la escuela. Nadie sabe dónde puede encontrarse.
Leo Caldas pronto comprobará que, en la vida como en el mar, la más apacible de las superficies puede ocultar un fondo oscuro de devastadoras corrientes.
Un amanecer, muy cerca de la Navidad de 2018, la cabeza de la joven Sarah Evans aparece en medio de una calle concurrida de San Francisco. La ciudad se despierta con horror y la policía encuentra el resto del cuerpo en casa de la víctima: desnudo, arrodillado y con los brazos amarrados a las paredes. El inspector William Parker, especialista en asesinos en serie, lleva un tiempo alejado de sus funciones y retirado del cuerpo tras un caso particularmente traumático, pero la teniente Watson está convencida de que solo él puede ayudarla a desentrañar el misterio de esta muerte macabra. Tras muchas dudas, Parker decide aparcar sus viejos temores y se lanza de lleno a una investigación que cambiará todo lo que creía saber sobre aquel viejo caso que inútilmente había intentado olvidar.
Mientras tanto, el experiodista valenciano Fernando Fons, llegado recientemente a San Francisco tras huir de un trágico reencuentro, sigue con interés la búsqueda del asesino al que la prensa ha apodado «el Verdugo». Así, Parker y Fons se embarcarán por separado en una carrera hacia el peligro, acercándose poco a poco el uno al otro y aproximándose también a un secreto que muchos intentan proteger a toda costa.
Emilia Ward, la escritora de las exitosas novelas de misterio protagonizadas por la policía Miranda Moody, vive feliz en un barrio acomodado de Londres con su marido y sus dos hijos, una adolescente de su primer matrimonio y un niño pequeño del segundo. Pero cuando Emilia está ultimando los detalles de su última novela, la vida da un giro inquietante: un incidente sacado directamente de la trama de uno de sus libros ocurre en la vida real. Una coincidencia inquietante, tal vez. Hasta que suceda una vez, y otra más.
Y, a continuación, alguien es asesinado siguiendo el mismo modus operandi que ella ha descrito en el manuscrito que está escribiendo, pero hay un problema: sólo lo ha leído su editora y sus más allegados.
¿Qué mente retorcida se oculta tras los hechos? ¿Y si Emilia y su familia son los siguientes?
Hannah Swensen no tiene tiempo para aburrirse. Cuando no está atendiendo a la clientela de su panadería The Cookie Jar, está impartiendo clases de cocina para adultos en el Instituto Jordan o intentando encontrar el ingrediente secreto de unos cupcakes de chocolate. Todos en Lake Eden creen que Hannah tiene un imán para los crímenes, pero cuando descubre un cadáver dentro de un contenedor de basura le resulta muy difícil mantenerse al margen. Primero, porque la víctima tiene el pecho manchado del glaseado de uno de sus cupcakes y, segundo, porque se trata del sheriff Grant, el rival directo de su cuñado Bill para el puesto de sheriff y el principal sospechoso. Secretos del pasado, mentiras inconfesables y maquinaciones oportunistas son los ingredientes de este caso.
En una de sus novelas más ambiciosas, el autor de El Padrino consigue plasmar con extraordinaria viveza las costumbres de la Mafia y los ambiguos mundos de Las Vegas y Hollywood. Un año después de cometer el acto más salvaje de su vida, Domenico Clericuzio, capo de la última gran familia de la Mafia, toma una determinación: la generación de sus nietos vivirá ajena al mundo del crimen. Desde su espectacular mansión en Long Island, el Don controla negocios de Las Vegas y de Hollywood que le permitirían legitimar su fortuna. Pero cuando esté cerca de conseguir su objetivo, ciertos secretos familiares del pasado amenzarán con socavar su plan y con desatar una guerra. Y es que el último Don no puede ignorar que lo único que los Clericuzio saben hacer bien es matar.