La sexta entrega de la saga romántica medieval «Las guerreras Maxwell».
En su lecho de muerte, Harald Hermansen le prometió a su amada Ingrid que dejaría Noruega y se trasladaría a vivir en Escocia. Harald añora su país, como añora a su mujer y sus gentes, pero sabe que regresar al Reino de Song no sería buena idea, especialmente porque allí ya no le queda nada. A pesar de ser considerado un bárbaro vikingo en aquellas tierras, gracias a la ayuda de Demelza y de Aiden McAllister, su marido, Harald consigue llevar una vida tranquila, sacar adelante su propia herrería y ser aceptado por la mayoría de los parroquianos. Pero todo comienza a complicarse cuando aparece una joven llamada Alison. Ella y su manera de comportarse, tan parecida en ocasiones a la de su fallecida mujer, lo atrae y lo espanta al mismo tiempo. Pero si algo tiene claro es que no quiere volver a enamorarse, y menos de una mujer como aquélla.
¿Será capaz Harald de decirle adiós al pasado, vivir el presente y crear un futuro?
René, un anciano transgénero que tocaba el piano en cabarets, pasa los últimos momentos de su vida postrado en una cama bajo la estricta vigilancia de Olga, una enfermera con la que rememora días de militancia, y viejos amores y amistades.
Ahora, a sus noventa y tres años, echa la vista atrás para evocar tanta vida compartida y duramente conquistada: las revueltas de Stonewall, la represión policial, décadas de activismo por los derechos de la comunidad LGTBIQ+, los estragos de la irrupción del sida, que tantos amigos se llevó, los cuidados entre personas que comparten la marginación... ¿Adónde ha ido a parar tanto esfuerzo, si siguen oyéndose voces intolerantes que amenazan con derrumbarlo todo? René sabe que su lucha y la de sus amigas no ha cesado: lo que empezó en los años sesenta sigue en la era Trump.
Cuando Edie Ledwell, angustiada y con aspecto descuidado, aparece en la oficina suplicando hablar con la detective privada Robin Ellacott, ésta no sabe muy bien cómo afrontar la situación. Edie, cocreadora de una popular serie de dibujos animados llamada Un corazón tan negro, está siendo acosada por internet por un misterioso personaje llamado Anomia, del que está desesperada por descubrir su identidad.
Robin decide que no puede ayudarla y no vuelve a pensar en ello hasta que, unos días más tarde, Edie aparece apuñalada y muerta en el cementerio de Highgate, el escenario de la serie Un corazón tan negro.
Robin y su socio Cormoran Strike se ven entonces envueltos en la búsqueda de la verdadera identidad de Anomia. Pero, con una compleja red de nombres falsos en línea, intereses comerciales y conflictos familiares que resolver, Strike y Robin trabajan en un caso que pone a prueba sus poderes de deducción y los expone a una amenaza insospechada.
Laurie no cree en el amor a primera vista. Piensa que una cosa son las películas y otra, la vida real. Sin embargo, un día de diciembre, su mirada se cruza con la de un desconocido a través de la ventanilla empañada de un autobús. Surge la magia y Laurie se enamora perdidamente, pero el autobús arranca y sigue su camino por las calles nevadas de Londres.
Está convencida de que es el hombre de su vida, pero no sabe dónde encontrarlo. Un año después, su mejor amiga Sarah le presenta a Jack, su nuevo novio, del que está muy enamorada. Y sí, es él: el chico del autobús.
Laurie decide olvidarle, pero ¿y si el destino tiene otros planes?
Un encuentro nos da a conocer a un Kundera, en cierto modo, inédito. En efecto, aunque el autor reflexione sobre sus «viejos temas existenciales y estéticos», lo cierto es que en este apasionado ―y apasionante― «encuentro» con algunas obras maestras de la literatura, la música y la pintura, el escritor checo aborda cuestiones hasta ahora poco o nada transitadas en sus libros anteriores.
Así, explora lo que la novela puede explicar sobre el ser humano, e indaga asimismo en las repercusiones, no siempre negativas, que el exilio tiene para el creador. También desentraña el papel de la memoria ante las tragedias del siglo XX y habla de la lucha desesperada del verdadero artista por asumir lo mejor de la tradición de su arte.
La trama se desarrolla a partir de que un extraño individuo viola y asesina brutalmente a Nina, una joven casada con Steve y madre de Neil, un chiquillo que es testigo del crimen. Ello desata un torbellino de acción, en la que subyace, con la fuerza narrativa que caracteriza a la autora, el debate sobre la eficacia de la pena de muerte.
Te encuentras en casa preparando la cena mientras esperas a que tu marido vuelva del trabajo. Estás deseando verle. Eso es lo último que recuerdas. Despiertas en el hospital sin saber cómo has llegado hasta allí. Te cuentan que has sufrido un accidente. Perdiste el control de tu coche mientras conducías a toda velocidad por uno de los peores barrios de la ciudad. La policía sospecha que ocultas algún secreto oscuro, pero tu marido se niega a creerlo. Tu mejor amiga no está tan segura. Y ni siquiera tú sabes qué creer...
Apenas unos kilómetros de distancia separan a tres mujeres que no se conocen entre sí.
La Pelirroja Uno es una doctora soltera de cerca de cincuenta años; la Pelirroja Dos una profesora de escuela en la treintena; y la Pelirroja Tres una estudiante de diecisiete años.
Las tres son vulnerables. Las tres son el objetivo de un psicópata obsesionado por demostrar al mundo quién es él en realidad. Ahora que se acerca al final de su vida, necesita llevar a cabo su obra de arte final. Crímenes que serán estudiados en las universidades, de los que se hablará durante décadas. Crímenes perfectos...
El asesino les dice a las tres mujeres que va a matarlas. No saben cuándo ni cómo ni dónde. Solo saben que él está ahí fuera, cada vez más cerca. Que lo sabe todo sobre ellas. Que las ha seguido durante meses. Y que ahora va a comenzar un terrible acoso psicológico que las empujará paso a paso hacia la muerte.
Como si nadaran entre tiburones, no saben si el peligro está delante o detrás de ellas, si está cerca, si está lejos, si deben seguir nadando o si es mejor quedarse quietas, si deben unirse o actuar por separado... Solo tienen dos opciones: esconderse y esperar, o luchar e intentar ser más listas que su depredador.
Una madre y su hija viajan desde distintos lugares para reunirse en la ciudad de Tokio. Allí, durante los plácidos días del otoño nipón, pasean junto a los canales, se refugian de la lluvia en pequeños restaurantes, visitan templos, casas de té, vanguardistas obras de arte moderno… Y mientras tanto, hablan: del tiempo, del horóscopo, de la ropa y los objetos, de la distancia y la memoria… Sin embargo, su diálogo parece en todo momento teñido de incertidumbre, ocupado por unos desasosegantes espacios vacíos que remiten constantemente a las mismas preguntas: ¿cuál es la auténtica razón de su viaje?, ¿qué hay en realidad tras cada una de las palabras que cruzan?
A la vez delicado ajuste de cuentas y emocionante elegía, esta novela de tranquila y luminosa belleza indaga, bajo su serena sencillez, en las verdaderas dimensiones del amor familiar y en la posibilidad de hallar para este un lenguaje común.