Las ciencias y la revolución tecnológica ofrecen emancipación a las necesidades humanas. La filosofía apuesta por un proyecto de sentido basado en la razón. La religión promete trascendencia y salvación, no solo para el más allá de la muerte, sino para el más acá de la vida. Son tres proyectos distintos, pero que nunca se han dado aislados. Sus dinámicas interaccionan y se apoyan al mismo tiempo que se critican y buscan imponerse.
Cada una de estas tres propuestas ha fracasado y ha bloqueado al ser humano. La crítica a la religión es tan vieja como la filosofía, y la ciencia moderna la ha sustentado. Pero hoy es la creencia religiosa la que puede interpelar a la increencia avisando de las trampas en las que caen ciencia y filosofía y contribuyendo a sus ofertas de emancipación y sentido.
¿Por qué hay un universo en lugar de nada? ¿Cuáles son las razones de la complejidad del mundo? ¿Cuál es el propósito de nuestra vida y cuáles son los secretos de nuestro futuro?
Esta obra trata de responder ―de forma breve, accesible, atractiva― a estos y otros interrogantes desde las perspectivas de algunos de los pensadores más influyentes y relevantes de nuestro tiempo. De este modo, arroja nueva luz sobre la naturaleza, el propósito y el destino final de nuestro universo.
Los misterios de la existencia impactan sobre todos y cada uno de los aspectos de nuestro ser. Tanto si consideramos que Dios es una hipótesis convincente como si no, la decisión que tomemos al respecto podría ser la más importante que hayamos tomado en la vida.
Perspectivas del Absoluto, situado en el ámbito de la fenomenología de las religiones y de la experiencia místico-religiosa, explora el territorio transconfesional con la intención de favorecer el diálogo sobre lo sagrado.
Los seres humanos percibimos las distintas manifestaciones de lo sagrado a través del entorno que nos configura, y las interpretamos a partir de la religión o cosmovisión que profesamos. En efecto, lo sagrado está presente en todas las tradiciones como horizonte último y primero, el cual se muestra a través de las formas físicas, mentales y espirituales que nos moldean en un proceso continuo de asunción y a la vez de trascendimiento.