De enero de 1912 a mayo de 1915, Arnold Schönberg llevó un diario―el único del que se tiene constancia―en el que anotó sus vivencias, sentimientos y reflexiones. A pesar de su brevedad, se trata de un documento de enorme interés, pues nos brinda una instantánea de su vida en Berlín en un momento trascendental de su carrera, mientras componía Pierrot lunaire. El presente volumen incluye además el texto con el que presentó su ópera cómica De hoy a mañana en una emisión radiofónica de la Funk-Stunde Berlin. Asimismo, Josef Rufer, discípulo y estrecho colaborador de Schönberg, ofrece a modo de homenaje un ensayo en agradecimiento a lo que vivió y aprendió del maestro desde 1919, cuando lo conoció, hasta su muerte.
Tras plantar a su prometido en el altar y renunciar a su trabajo como policía en Miami, Beau Hayley va dando tumbos por la vida. No siente nada. Solo resentimiento. La muerte de su madre fue calificada de accidente. No está convencida de ello. Pero cuando conoce a James Kelly, un hombre tan herido como ella, algo cambia. A pesar de su apariencia gélida, despierta en Beau un torrente de emociones prohibidas. James es placer. Un completo enigma.
James Kelly solo tiene una misión: vengar brutalmente la muerte de su familia. El entramado de crímenes y engaños le conduce irremediablemente hacia Beau Hayley, la hija de la agente del FBI que le persiguió sin descanso hasta su muerte.
El crimen supone una violación del mandato más elemental de la existencia humana: preservar la vida. Cuando se produce nos queda, al menos, el ánimo de comprender el porqué de esa ruptura. En este libro nos vamos a encontrar con 30 casos en los que faltan una o varias piezas que, en su momento – u hoy mismo, porque el crimen no caduca – impidieron completar el puzle policial y judicial del asesinato.
En este libro repasamos varios casos que han despertado el asombro del público, incluyendo tanto robos históricos como atracos del nuevo siglo: los robos digitales, pero siempre conservando la fascinación que generaron en su momento. Relatamos las motivaciones de los autores, sus planes y el desenlace de sus actos: fracasados o exitosos… según quién los mire.
Partimos en orden cronológico desde la antigua Roma y sus venenos y avanzamos por la oscura Edad Media, época de brujas y señores feudales que tiñeron de rojo una época gris plomo. Con la llegada de los medios de comunicación se arrojo luz sobre las fechorías de criminales movidos por la avaricia y la lujuria. En estas páginas no intentamos comprender lo que les llevó a pecar, porque no hay escusas. Pero sí planearemos sobre lo más destacado de sus biografías para, al menos, intuir qué caminos embarrados llevan hasta la perdición.
El protagonista de esta historia, Orlando, un muchacho aristócrata de la corte de Isabel I no solo vive con intensidad una dilatada época que va des de la época isabelina hasta nuestros días, sino que tras un profundo sueño, se despierta encarnado en mujer. La agilidad con la que la autora teje este juego es una muestra excelente de un sentido del humor que pocas veces asociamos a la personalidad de Virginia Woolf y una exploración sobre la condición femenina que influirá en posteriores estudios de género.