Actually, every book does this. We are all part of the books we read, because our individual reactions, ideas, and emotions make the book whole, and these things are changing all the time. Keri Smith has helped millions of people free their creativity and find their own voice with her interactive books, and now she brings that sensibility to children and to the act of reading. This picture book is an invitation to honor your own vision and to welcome imperfection. Kids will discover that reading can engage all five senses, and that what they themselves bring to a book is an important contribution.
¡Hola a todos!
Soy Emma y tengo un problema, bueno, en realidad tengo unos cuantos.
¿Recordáis el beso con Kaiden? Pues nunca me hubiese imaginado la que se iba a liar… Lo que era una lista de sueños por cumplir se ha convertido en un montón de problemas por resolver. ¡Qué difícil es hacerse mayor!
Adoro el instituto, a mis nuevos amigos y el club de atletismo, pero… ¿Mar? ¡Me está haciendo la vida imposible! ¡No la soporto! Suerte que tengo a mis amigos a mi lado en lo bueno y en lo malo.
En fin, yo solo quiero disfrutar del atletismo, pasar un buen rato con Kaiden, Beatriz y los demás y que Mar me deje en paz.
Con este libro, Gabriel García Márquez se descubrió a sí mismo como un narrador. Sin embargo, la intención primera era escribir un reportaje sobre un hombre, Luis Alejandro Velasco, que estuvo diez días a la deriva en una balsa mecida por el mar Caribe. El futuro Nobel de Literatura y entonces joven reportero que era García Márquez escuchó el relato de los hechos de boca de su protagonista y los transformó, tal vez sin pretenderlo, en un prodigioso ejercicio literario, una narración escueta y vigorosa donde late el pulso de un gran escritor. La publicación por entregas del reportaje en El Espectador de Bogotá supuso un alboroto político considerable -se revelaba la existencia de contrabando ilegal en un buque de la Armada colombiana, lo que costó la vida de siete marineros y el naufragio, más afortunado, de Velasco- y el exilio para su autor.
Lejos de ser sentimientos superficiales, los actos de amabilidad (tanto si se dan como si se reciben o simplemente se presencian), son un poderoso elixir que tiene un impacto profundo y duradero en nuestra salud mental y física.
Desde aumentar la alegría hasta apaciguar la mente, la amabilidad no es una simple sensación de bienestar, sino una auténtica fuerza motriz. Relaja el sistema nervioso, disminuye la presión arterial, reduce la inflamación e incluso puede ralentizar el envejecimiento a nivel genético.
Este libro sirve como un faro, instándote a derrochar amabilidad a tu alrededor. Porque en un mundo donde reina la apatía, comprometerse con las cosas es un acto revolucionario. Y cuando lo hacemos, no solo nos enriquecemos nosotros: también llevamos alegría a nuestras comunidades y al resto del mundo.
Esta es la historia de una familia amarrada por una trama obsesiva, entre la precariedad del cuerpo, sus males incesantes y la inminencia de la pérdida.
En esta particular biografía clínica de todo un clan, cada miembro va eludiendo los embates de la vida con ansiedad, con afecto, con resentimiento y violencia,con culpa, con imaginación, con chispazos de humor negro. Y con malentendidos que hacen saltar los circuitos del nerviososistema familiar.
El pasado y el presente orbitan por estas páginas narradas desde la perspectiva de una protagonista que, radicada en el extranjero, mantiene un equívoco contacto consu familia mientras intenta escribir una tesis astronómica y va internándose por agujeros negros cada vez más profundos.
Un bucólico cuento repleto de libros de hechizos robados, amistades inesperadas, azucaradas mermeladas y amores todavía más dulces.
A Kiela siempre le ha costado relacionarse con las personas. Por suerte, como bibliotecaria en la Gran Biblioteca de Alyssium, se ha pasado la última década recluida entre los libros de hechizos más preciados del imperio, preservando su magia para la élite de la ciudad.
Cuando estalla una revolución y la biblioteca se incendia, Kiela huye acompañada de su ayudante Caz, una planta mágica sintiente, y con todos los libros de hechizos que son capaces de cargar. Su destino es una isla remota que jamás pensó que volvería a ver: el hogar de su infancia. Tras refugiarse en la casa de sus recuerdos, descubre que su vecino es un chismoso (muy atractivo) que no capta las indirectas y que se empecina en visitarla día tras día para asegurarse de que tenga comida y ayudarla a arreglar su nuevo hogar.
Desesperada por generar ingresos, Kiela descubre algo que ni siquiera la panadería del pueblo puede ofrecer: mermelada. Con la ayuda de un antiguo recetario de sus padres y un poco de magia, el jardín de la casa no tarda en ser invadido por arbustos cargados de bayas maduras.
Pero la magia puede servir para algo más que endulzar la vida, así que Kiela decide correr el riesgo que le puede suponer el uso de hechizos y abre la primera tienda de hechizos clandestina.