Arden James es la actriz joven más sexy de Hollywood... y también la más perseguida por la prensa a causa de sus escándalos. Cuando su mala reputación casi le cuesta el papel de sus sueños, Arden y su representante inventan una mentira para darle la vuelta a la situación. Pero, para que funcione, tendrá que volver a casa para las vacaciones de Navidad por primera vez en cuatro años.
Caroline Beckett ha pasado los últimos cuatro años puliendo un porfolio estelar que la llevará a un programa de periodismo de primer nivel en la universidad de Columbia y convenciéndose a sí misma de que no podría estar menos interesada en lo que su ex mejor amiga y primer amor ha estado haciendo desde que se fue sin mirar atrás.
Elena es una chica responsable, nada alocada e incapaz de sacrificar su futuro profesional por una relación. Tiene un archienemigo desde el colegio al que llama «el Indeseable»…, y acaba de despertar junto a él en su cama después de la boda de su mejor amiga.
Marcos lleva toda la vida sacando de quicio a Elena con sus comentarios de sobrado y sus ojos azules como el mar. Quiere olvidar los malos rollos y dejarse llevar durante el verano por una atracción irresistible antes de volver a Londres. Y aunque Elena intenta ignorarle, Marcos es tan obstinado como sexy y la química entre ellos resulta inevitable.
El ser humano ha olvidado que hace millones de años comenzó un juego que consistía en ignorar, momentáneamente, su esencia divina. Poco a poco dejó de ver las cosas tal como eran para crear una realidad a partir de un sistema de creencias, inconsciente e incontrolado, según los modos negativos de la propia vida emocional.
El poder de elegir profundiza en el arquetipo de la víctima y en cómo deshacerse del excesivo personalismo, disolviendo las porciones del ego que nos impiden trascender.
En todo cuanto tiene que ver con "El Egoísta" perderíamos el hilo de la narración si no recordáramos que se trata de una comedia, no de una tragedia, y que es precisamente el espíritu cómico lo que permite a George Meredith reproducir, sin el riesgo inherente a una exposición histórica que pretende ser fiel a los hechos, «las estructuras elementales del parentesco» de las que depende toda la trama de la novela. Que el espíritu cómico, sin embargo, representara solo a medias las intenciones del autor, como Meredith le había confesado a Stevenson al terminar de escribir la novela, sugiere que la otra mitad suponía, al menos, una amenaza latente en la narración.
Caballero entre los caballeros, poeta entre los poetas, donjuán entre los donjuanes, tahúr entre los tahúres de burdel. Tan exquisito como insidioso en la palabra. Tan arriesgado como apasionado en los dormitorios ajenos. Tan hábil como excesivo con los naipes. Tan gallardo montando a caballo como implacable alanceando toros, hasta el punto de que inventaron para él, según dicen, la expresión de «picar demasiado alto». Don Juan de Tassis, conde de Villamediana, escribió su propia leyenda en el Siglo de Oro: la de un caballero español cuya fama, de Flandes a Roma y de Nápoles a París, traspasó todas las fronteras.
While on a writer’s residency, a nameless narrator focuses on the color white to creatively channel her inner pain. Through lyrical, interconnected stories, she grapples with the tragedy that has haunted her family, attempting to make sense of her older sister’s death using the color white. From trying to imagine her mother’s first time producing breast milk to watching the snow fall and meditating on the impermanence of life, she weaves a poignant, heartfelt story of the omnipresence of grief and the ways we perceive the world around us.