La vivienda es todo menos un asunto privado. Como expresión de las condiciones objetivas y como conflicto social permanente goza de centralidad política. En el campo de tensión entre el mercado, el Estado y las prácticas cotidianas, las encrucijadas principales de nuestra sociedad se reflejan en el acceso a la vivienda. En 1872, Friedrich Engels publicó Sobre la cuestión de la vivienda desde una perspectiva de la economía política. El texto subraya la imposibilidad del derecho a la vivienda sin cambios revolucionarios. 150 años después, sorprende la vigencia de sus análisis, que permiten reconocer cuestiones aparentemente específicas del desarrollo urbano como principios estructurales del capitalismo.
Sin embargo, abordar la cuestión de la vivienda en el siglo XXI significa pensar más allá de Engels. Los planteamientos feministas sobre la reproducción de los roles de género, los retos ecológicos, o el alcance de la regulación e intervención estatal en el sector, han añadido nuevos elementos a la cuestión. Ahora bien, ¿dónde queda la revolución, la propuesta engelsiana definitiva, también en el ámbito de la vivienda?
En Lo que Engels no podía saber. La vivienda como bien de inversión Andrej Holm actuliza las hipótesis intermedias de Engles, y plantea distintas posibilidades para la resolución de los problemas de acceso a la vivienda. Lo llama reformismo radical, una vía de propuestas concretas que, conjuntamente, representarían una alternativa cargada de potencia revolucionaria. En algún lugar, entre Engels y Holm, hay unas cuantas respuestas.
¿No existen los personajes de las novelas que nos apasionan? ¿No son verdaderas las figuras del cuadro que nos absorbe o las escenas de la película que nos aterroriza? ¿Por qué nos emocionan así entonces? ¿Por qué nos las creemos tanto como para sollozar o reír a carcajadas? Actualizando un tema clásico del pensamiento occidental, la pregunta por el estatuto de realidad que corresponde a las creaciones artísticas, Pablo Maurette (autor de El sentido olvidado: ensayos sobre el tacto, Mar Dulce editora, 2015) compone aquí un ensayo brillante, preciso y delicioso. Armado con el concepto grecolatino de evidencia, Maurette recorre hitos artísticos y filosóficos de toda nuestra tradición (de Platón a Susan Sontag, pasando por Giotto o Proust), deteniéndose especialmente en un cuento de Julio Cortázar y en una película de Quentin Tarantino, para desnudar como nunca las herramientas y estrategias clave de esa mágica fábrica de verdad que son nuestras ficciones.
"Plata quemada" cuenta, o dice contar, una historia real. A la manera de "A sangre fría" («una novela de no ficción»), y con una trascendencia comparable, en el panorama de nuestro idioma, a la que tuvo el libro de Truman Capote, esta «versión argentina de una tragedia griega» escenificaba, ya en 1997 (cuando se publicó por primera vez en Argentina), lo que casi toda la narrativa de hoy convierte en un ejercicio de estilo: el cuestionamiento de los géneros, de la verdad (o la falsedad) de cualquier texto. Empeño que pocas veces ha dado obras tan importantes como "Plata quemada", un libro en el que la forma, tan política en el efecto, e inseparable de lo que se cuenta, parece ser la del documento, la del registro forense o periodístico, la del informe psiquiátrico (el de la formulación de la ideología) y al mismo tiempo la más lírica. El libro más accesible del autor, y por ello doblemente genial.
Solemos identificar a María Moliner con su diccionario, «el más completo, útil y divertido de la lengua castellana», según García Márquez. ¿Pero por qué se sentó a escribirlo a los cincuenta años, en plena dictadura franquista? ¿Cómo pudo completar, prácticamente sola, el diccionario de autora más importante de todos los tiempos?
Hasta que empieza a brillar cuenta la historia íntima de María Moliner, partiendo de una atractiva premisa literaria: narrar de cuerpo entero a la protagonista a través de su vínculo con la lengua. A la vez, nos propone una sugerente hipótesis: ¿y si su diccionario fuese también una suerte de autobiografía oculta?
Esta es la vida novelada de una figura apasionante, retratada desde una infancia difícil hasta un final insospechado, pasando por su extraordinaria labor como bibliotecaria en la República o su polémica candidatura a la Real Academia. Entre la investigación y la imaginación, combinando la comedia, el drama familiar y la tragedia colectiva, se abre paso la historia de una resistencia secreta. Un acto de justicia con el legado de una mujer que vivió a contracorriente y exploró las palabras hasta que empezaron a brillar.
Además de haber publicado cuentos, novelas, poemas y ensayos, Gilbert Keith Chesterton también escribió teatro. Lo hizo a instancias de su buen amigo George Bernard Shaw, quien, después de insistirle mucho, logró convencerlo de que tenía algo que aportar al teatro inglés. En este volumen de Teatro completo se reúnen las únicas cuatro obras teatrales que Chesterton escribió: Magia (1913), El juicio del Dr. Johnson (1927), La sorpresa (1932), y el sainete navideño El pavo y el pavor (1930). En todas ellas se desarrollan de formas inesperadas algunas de las características fundamentales de su obra, como son su estilo paradójico, su antitradicionalismo acérrimo, su liberalismo radical y su capacidad de asombro. Sin duda, ningún género mejor que el del teatro para encarnar el espíritu de un autor que creía que tanto más contradictorias son las cosas cuanto más nos acercamos a la verdad. «Necesario, divertido, estimulante, a ratos perturbador y a ratos una pura majadería, este libro no solo completa el rompecabezas literario que representa G. K. Chesterton, sino que abruma con chispazos e ideas que atañen a la más inmediata actualidad política y religiosa. Increíble incluso para ser Chesterton». Jordi Gracia
Written to be read aloud to babies and babies-to-be (yes, babies in utero!) the book includes an introduction by Mrs. Dr. Seuss Audrey Geisel revealing how she and Theodor were fascinated by the idea that babies could hear sounds while still in the womb. With sixteen pages featuring guided prompts and Seussian illustrations for parents to record their child’s first memories of reading, this warm and winsome welcome to the world of Dr. Seuss will be cherished for generations!