Una bella, emotiva y comprometida reivindicación de la oscuridad como un espacio de libertad, resistencia, conocimiento y transgresión.
En nuestra cultura, tendemos a relacionar la oscuridad con el mal, el miedo, la ignorancia y la barbarie, pero en ocasiones puede ser un refugio acogedor. Sucede con las salas de cine, santuarios en los que se forjan mitos, deseos e ideales, templos del placer en cuya noche artificial podemos liberar nuestras emociones reprimidas y buscar respuestas que rara vez encontramos en la luz del día. En nuestro presente de pantallas múltiples, este libro reivindica – sin nostalgia ni resignación– los cines en los que los espectadores comparten esperanzas y angustias, sueños y pesadillas. La oscuridad de estas salas es iluminadora.
Un hijo, una madre. Ella, joven todavía, ha enfermado. Intercambiando roles, él la cuida y, a la vez, se despide y la celebra. Todas y cada una de las palabras de este libro resuenan con temblor, intensidad y precisión, delimitando el dolor compartido con respeto amoroso. De hondura lírica y delicada sobriedad: así se revela su escritura. También su silencio.
Andrés Neuman escribió estos poemas en secreto, cuidando de su madre frente a la proximidad de la muerte: la poesía como testimonio y refugio para crear un espacio —una isla de sentido— donde fijar la presencia amada, traduciendo su cuerpo a una música íntima. Aquellos textos permanecieron al fondo de un cajón, garabateados en hojas sueltas y papeles de hospital, sin que su autor se atreviese a releerlos. Quince años más tarde, impulsado por la intuición de que sólo abriendo el manuscrito resultaría posible cerrar el duelo, hoy rescata estos versos que entretejen tristeza y luminosidad.
Perpetuación de la madre mediante la lengua materna, ritual de gratitud, Isla con madre se arroja a nombrar la difícil belleza y la cruda emoción que irradia.
Pánfilo, Blurp y Bagel se embarcan en una nueva aventura. Montados a lomos de su dragón, se dirigen hacia las legendarias Tierras Lejanas. ¡Esta vez están bien preparados! Pero no contaban con la hermana pequeña de Bagel, que discretamente se ha colado en el equipaje y traerá consigo un montón de sorpresas.