En contadas ocasiones, la historia de una vida es también la historia de una época. Tras jugar un papel importante como comunista bajo el régimen autoritario de Pilsudski, haber ido a la guerra, y haber conocido las cárceles y los gulags de la Unión Soviética, Aleksander Wat logra regresar vivo a su Polonia natal en 1947 para emigrar a Francia en 1958, ya muy enfermo, hastiado del clima asfixiante y opresivo de la falta de libertad. Pero su enfermedad le impedía escribir. Será Czes_aw Mi_osz, conocedor extraordinario de su historia, quien le proponga llevar a cabo una serie de entrevistas que posteriormente transcribiría y que conformarán un libro de memorias fundamental del convulso siglo xx.
Andreas se dispone a pasar una noche más a la intemperie en las frías calles de París cuando, de pronto, se le acerca un enigmático desconocido con una inusual propuesta: le prestará doscientos francos con la única condición de que, tan pronto como le sea posible, salde su deuda donando el dinero a la santa Teresita de Lisieux en la iglesia de Sainte-Marie des Batignolles. Andreas, alcoholizado y vagabundo, acepta, y su vida se torna una sucesión de pequeños milagros... Este magistral relato de tintes premonitorios, considerado el testamento literario de Roth, es quizá su obra más célebre y evocadora. De estilo sobrio, conciso y sumamente irónico, las múltiples lecturas que ha inspirado a lo largo de los años acreditan la vigencia del texto.
Claire Lidman falleció catorce años atrás, pero Samuel, su marido, siempre se ha negado a aceptarlo. Cuando un buen día cree reconocer su perfil en una fotografía tomada delante de la basílica de San Marcos, en Venecia, recurrirá al profesor de Psicología Hans Rekke y la policía Micaela Vargas en busca de ayuda. Los dos se muestran escépticos al principio, pero Rekke descubre indicios sorprendentes. ¿Es posible que Claire siga viva? ¿qué la llevó a desaparecer? ¿O sólo quieren aceptar el caso como excusa para seguir trabajando juntos?